El auge del nomadismo digital está acelerándose a medida que el trabajo remoto se vuelve más común. Una estudio reciente reveló que casi el 10 % de los trabajadores en los Estados Unidos ahora se identifican como nómadas digitales. Aunque la imagen típica de un nómada digital es la de una persona joven, soltera y en sus treintas viajando de un país a otro, también es una opción viable para las familias. Sin embargo, adoptar este estilo de vida en familia presenta desafíos únicos. Analicemos estos en detalle.
Nómadas digitales: Separando hechos de mitos
Un nómada digital vive y trabaja sin una dirección permanente, dependiendo de empleos remotos en línea ya sea como empleado o freelancer. A pesar de su creciente popularidad, varios mitos rodean este estilo de vida. No todos los nómadas digitales cruzan fronteras con frecuencia; de hecho, el 40% trabaja y viaja dentro de su país de origen. Para aquellos que se aventuran internacionalmente, el número de destinos y la duración de las estadías pueden variar significativamente, con una duración promedio en un país de aproximadamente 5,7 semanas, ligeramente superior a las 5,4 semanas de la encuesta anterior.
Además, este estilo de vida no equivale a una libertad sin límites. A menudo, los nómadas digitales deben obtener visados específicos para residir y trabajar legalmente en un país extranjero más allá de lo que permite un visado de turista. Actualmente, alrededor de cuarenta países, incluyendo España, Mauricio, Tailandia, Dubái y Brasil, ofrecen visados especializados para nómadas digitales. Estos visados, generalmente más difíciles de obtener que los de turista, permiten trabajar legalmente y suelen ofrecer una estadía de aproximadamente un año con opciones de renovación. Importante destacar que estos visados a menudo permiten incluir a familiares, proporcionando una ventaja frente al visado de turista, que se enfoca en el individuo.
Navegando el nomadismo digital en familia
El estilo de vida de una familia nómada digital combina viajes y trabajo remoto, una opción cada vez más común. Considere la historia de Valerie: en 2017, pasó de trabajar en cuidado infantil a redactar contenido web para explorar el mundo con sus tres hijos. Su viaje ha incluido paradas en España, Inglaterra, México y Mauricio, quedándose típicamente de dos a tres meses en cada lugar, aunque desde 2020 prefieren estadías más largas de al menos seis meses.
Gestionar la vivienda para una familia en constante movimiento requiere decisiones estratégicas. Valerie a menudo utiliza plataformas como Airbnb para encontrar apartamentos temporales, aprovechando tarifas mensuales más favorables por estadías prolongadas. Pero, ¿qué pasa con el trabajo y el seguro de salud? Como propietaria de un negocio, Valerie está sujeta a las leyes fiscales y cargos del país donde está registrada su empresa.
Por ejemplo, si un negocio está basado en Francia, seguirá estando sujeto a la fiscalidad francesa, aunque la seguridad social francesa no cubre la atención médica a nivel global, lo que exige un seguro de salud privado internacional o pólizas específicas de seguro de viaje.
El desafío logístico de organizar la vida diaria de una familia alrededor de un estilo de vida nómada es considerable, especialmente en lo que respecta a la educación de los niños. ¿Cómo se asegura un entorno de aprendizaje estable en medio de mudanzas frecuentes? Este aspecto del nomadismo digital requiere una planificación cuidadosa y opciones educativas flexibles.
Combinando escolarización y nomadismo digital
Si bien el nomadismo digital varía según la familia, a menudo permite estadías prolongadas en un país, lo que facilita la escolarización tradicional. Sin embargo, muchas familias nómadas eligen la escolarización remota a través de centros reconocidos. El requisito principal es una conexión a internet confiable para actividades escolares y profesionales.
Alternativamente, la educación en casa es una opción donde los padres gestionan directamente la educación de sus hijos. La educación en casa exige una preparación y organización sustanciales, especialmente para los padres que también trabajan. No es un rol que se deba tomar a la ligera, ya que los padres necesitan una comprensión sólida de los principios educativos para elegir materiales de aprendizaje adecuados.
Algunas familias exploran el unschooling, un método donde el aprendizaje es guiado por los intereses y el juego del niño. Este enfoque puede ser adecuado para niños más pequeños, pero puede presentar desafíos a medida que los niños se acercan a etapas de aprendizaje académico más estructurado y exámenes. Cada elección educativa en el estilo de vida nómada requiere una consideración cuidadosa para equilibrar las necesidades de escolarización con la flexibilidad de viajar.
Socialización para niños en familias nómadas
Las escuelas suelen ser el entorno principal para la socialización de los niños. Sin embargo, para las familias que adoptan el nomadismo, encontrar entornos sociales alternativos se vuelve crucial cuando la escolarización tradicional no es una opción. Muchos padres recurren a actividades extracurriculares locales, que permiten a los niños interactuar con sus compañeros e integrarse en la comunidad local.
Además, los espacios de "co-living" diseñados para familias nómadas, como casas, campamentos o ranchos, ofrecen otra solución viable. Estos espacios alojan a familias nómadas juntas por períodos que van desde una semana hasta un mes, proporcionando un entorno compartido para vivir y aprender. Este arreglo no solo fomenta un sentido de comunidad entre las familias, sino que también permite que los niños formen amistades durante su estadía.
Con fines educativos, algunos grupos nómadas forman "microescuelas itinerantes", donde los niños pueden participar en experiencias de aprendizaje grupal que imitan un entorno de aula. Esto puede ser particularmente beneficioso para mantener una rutina educativa mientras se permite la flexibilidad en la ubicación.
Además, unirse a comunidades de nómadas digitales puede ser una excelente manera para que tanto los padres como los niños se conecten con otros que llevan estilos de vida similares. Estas comunidades, que se pueden encontrar tanto en línea como en diversas ubicaciones alrededor del mundo, a menudo tienen grupos específicos enfocados en educación en casa para viajeros y otros temas relacionados, ayudando a romper el aislamiento que a veces puede acompañar la vida nómada.