Si sigues las noticias (especialmente las de YouTube), es posible que hayas oído hablar de varios casos de extranjeros deportados, arrestados o duramente criticados por comportarse de manera inapropiada en el extranjero. En este contexto, la discusión sobre la sensibilidad cultural adquiere protagonismo. Y esto es lo que exploraremos hoy.
¿Qué es la sensibilidad cultural?
La sensibilidad cultural a veces se confunde con la cortesía general y el deseo de no ofender a las personas. Pero es más que eso. La sensibilidad cultural se trata de comprender y respetar profundamente (y genuinamente)
las sutilezas de otra cultura.
Comienza siendo consciente de las normas, prácticas y valores culturales que pueden diferir mucho de los tuyos. Esta conciencia te permitirá adaptar tu comportamiento y forma de comunicarte a tu nuevo entorno – sin comprometer tus valores y estilo de vida en el proceso.
En esencia, la sensibilidad cultural se trata simplemente de respeto mutuo.
¿Por qué importa la sensibilidad cultural?
Exploremos esto a través de algunos ejemplos vívidos.
"Una turista chilena en Japón enfrenta críticas por hacer dominadas en la sagrada puerta torii del santuario Shinto".
En octubre de 2024, una gimnasta chilena e influencer de redes sociales publicó un video de ella misma haciendo dominadas en la sagrada puerta torii de un santuario Shinto en Japón. La puerta torii es un símbolo venerado en el país y tiene un profundo significado espiritual en la cultura local. Las acciones de la turista fueron ampliamente condenadas en las redes sociales japonesas – y muchos locales vieron sus acciones como una muestra de falta de respeto a su cultura y tradiciones.
Es cierto que, muy probablemente, la turista desconocía el significado de la puerta en la cultura local. Y no hay nada inherentemente malicioso en sus acciones. Sin embargo, esto es exactamente por lo que comenzamos nuestra conversación sobre la sensibilidad cultural y la importancia de la conciencia. Respetar una cultura diferente es casi imposible sin conocerla. Y aunque esto puede no ser un requisito absoluto para un turista, es prácticamente esencial para un expatriado.
"YouTuber estadounidense arrestado en Corea del Sur tras una serie de comportamientos provocativos".
En octubre de 2024, el YouTuber y streamer estadounidense Johnny Somali fue arrestado por la policía surcoreana tras una serie de acciones provocativas. Una de ellas incluyó besar y realizar un baile en la Estatua de la Paz – un monumento en honor a las mujeres de consuelo coreanas de la Segunda Guerra Mundial.
(*Las mujeres de consuelo fueron mujeres y niñas, muchas de Corea, China y otros territorios ocupados, que fueron forzadas o coaccionadas a la esclavitud por el ejército imperial japonés durante la Segunda Guerra Mundial).
Como era de esperar, el incidente provocó indignación y, junto con otras acciones irrespetuosas del streamer, resultó en su posterior arresto.
En este caso, no sabemos realmente si la persona en cuestión conocía el significado cultural de la estatua - hay informes contradictorios en línea. Sin embargo, aparte de este incidente específico, el comportamiento de Johnny Somali en Corea del Sur fue ruidoso, abrasivo y provocativo. Y en una cultura que prioriza la modestia y la humildad, su comportamiento provocó una reacción comprensible.
Los ejemplos que hemos mencionado aquí son extremos. Pero ilustran un problema común – la falta de sensibilidad cultural puede meterte en problemas.
¿Por qué es importante la sensibilidad cultural para los expatriados?
Los expatriados no son turistas. Si un turista comete un error cultural en el extranjero, se irá en una semana – y las únicas consecuencias de sus acciones podrían ser algo de vergüenza adicional. Los expatriados, en cambio, están tratando de construir una vida en un nuevo país.
Una razón clave por la que la sensibilidad cultural es esencial es porque te ayudará a prevenir malentendidos que de otro modo podrían generar fricciones – o incluso dañar seriamente tu reputación.
Por ejemplo, en muchas culturas de Asia Oriental, la humildad es un rasgo valorado, y la autopromoción abierta podría percibirse como arrogante. Un expatriado que desconozca esto podría dañar sin darse cuenta sus relaciones profesionales al hablar demasiado audaz y confiadamente sobre sus logros.
De manera similar, en países donde el espacio personal se enfatiza menos, como en algunas partes de Oriente Medio o Sudamérica, mantener una "distancia extra" puede percibirse como frío y poco amigable.
La sensibilidad cultural también abre puertas a conexiones más profundas. Cuando te esfuerzas por entender y honrar las tradiciones locales, demuestras que estás genuinamente interesado en una nueva cultura. Este esfuerzo a menudo se ve correspondido. Y cuanto más interés muestres en los demás, más probable es que se interesen en tu propio trasfondo y tradiciones.
Por ejemplo, un expatriado en Japón que se tome el tiempo para observar y seguir la costumbre de entregar una tarjeta de presentación con ambas manos y una ligera reverencia demostrará respeto por la etiqueta profesional local.
Además, la sensibilidad cultural permite a los expatriados comprender mejor los valores y emociones que dan forma a su nuevo entorno. Ser culturalmente sensible te hace más adaptable. Y cuanto más adaptable seas, más fácil te resultará afrontar diversas situaciones en un entorno extranjero: resolver un conflicto laboral, adaptarte a un ritmo de vida diferente, etc.
Cómo ser culturalmente sensible
Esta pregunta parece tan grande como el mundo mismo. La sensibilidad cultural es más un proceso que un logro. Es algo que desarrollas gradualmente, paso a paso, y cómo sucede puede ser muy diferente de un expatriado a otro.
La observación activa es una herramienta poderosa. Presta atención a cómo interactúan, se visten y se comportan los locales en entornos sociales o profesionales. ¿Las conversaciones son formales o casuales? ¿Las personas valoran el espacio personal? Estas señales pueden guiar tu comportamiento sin cruzar límites. Si tienes dudas, siempre es mejor preguntar educadamente que asumir — la mayoría de las personas apreciarán tu curiosidad y estarán encantadas de hablarte sobre su cultura.
El lenguaje juega un papel importante. Incluso aprender algunas frases básicas, como “hola,” “gracias,” o “disculpa,” en tu nuevo idioma puede causar una impresión positiva. Muestra esfuerzo y tu motivación por involucrarte. También es una buena idea ser consciente del lenguaje corporal: gestos que son amigables en una cultura pueden considerarse groseros en otra.
Las diferencias culturales requieren empatía. Haz tu mejor esfuerzo por no juzgar costumbres desconocidas – en su lugar, enfócate en comprender su importancia. Por ejemplo, en algunas culturas, la puntualidad se observa de manera estricta, mientras que en otras es más flexible. Si esta percepción no coincide con la tuya, podrías, de forma natural, frustrarte. Pero si simplemente reconoces esto como una diferencia que necesitas tener en cuenta, podrías ahorrarte mucho descontento.