Te has mudado recientemente al extranjero y acabas de terminar una estupenda comida en la terraza de un restaurante. El tiempo es precioso, y la decoración también. Quieres abandonar la mesa para pasear y digerir la comida mientras disfrutas de las vistas. Llega el momento de pagar tu excelente comida, y aquí viene lo más complejo. No es que no tengas suficiente dinero. Has traído mucha moneda local, y tu tarjeta de crédito también está bien surtida. Pero no sabes si debes dejar propina o no.
¿Dejar o no dejar propina?
Puede parecer gracioso, pero es mucho más serio de lo que creemos. En el restaurante, en el taxi, en el hotel o en la excursión con el guía, cuando se trata de dar propinas, cada país tiene sus propias costumbres. Desconocer estas costumbres no provocará un incidente diplomático, pero puede crear una sensación de incomodidad y malentendidos. Cualquier paso en falso puede parecer divertido o no, dependiendo de cómo lo percibas y de si los profesionales con los que tratas se arriesgan a sentirse ofendidos. En el peor de los casos, se le podría considerar un turista ignorante que no entiende nada, pero como es nuevo en el país, es obvio que no tiene claras las diferencias culturales. ¿Qué países tienen una cultura de la propina? ¿Dónde es muy importante la propina (moneditas o billetes para las almas más generosas)? Por otro lado, ¿en qué países la propina se considera un insulto?
Países en los que es mejor evitar las propinas
En Islandia, Japón y China, es un gran no. En ninguno de estos países existe una cultura de la propina. Se considera que el personal ya está pagado por hacer su trabajo. En el mejor de los casos, se considerará un insulto. En el peor de los casos, te verán como un insulto y como un ignorante. En ambos casos, te malinterpretarán y te negarán la propina. Se dice que en Japón incluso se enseña a los empleados durante su formación a rechazar las propinas de los turistas que no están familiarizados con las costumbres locales. Sin embargo, las cosas son ligeramente diferentes en China, gracias a, o por culpa de (según el punto de vista) los turistas. Es más probable que se acepte una propina en lugares turísticos, hoteles de lujo y otros establecimientos elegantes.
Países en los que la propina es poco frecuente
En estos países, la propina es sencillamente infrecuente. En Croacia, Dinamarca, Finlandia y Noruega, los residentes no están acostumbrados a dar propinas. Como las propinas no forman parte de las costumbres de estos países, los empleados pueden sentirse confundidos ante su muestra de gratitud. No obstante, en Croacia siempre se puede dejar algo de dinero extra si se está muy satisfecho con el servicio. En Finlandia, la propina se da a veces en los hoteles y restaurantes de lujo. En Noruega, la propina está incluida en la factura. Pero no dudes en dejar algo más si el servicio ha sido realmente excepcional.
Países en los que la propina es opcional
En los países que se enumeran a continuación, la propina depende de la opinión que le merezca el servicio prestado.
Europa
En los Países Bajos, Polonia, Portugal, Suiza y Suecia, nadie se ofenderá si no deja propina. Incluso puede que ya esté incluida en la factura, como ocurre en los hoteles holandeses y los restaurantes suecos. Pero si realmente te ha gustado el servicio, no dudes en dar un 10% más. Es opcional, pero siempre hace feliz al personal. ¿Y en Francia? Es posible que haya escuchado muchas contradicciones sobre este país. Algunos dicen que la propina es la norma, pero eso no es cierto. De hecho, esta tradición está desapareciendo poco a poco. La mayoría de los franceses creen que los empleados ya reciben un salario completo (aunque no siempre esté en consonancia con su trabajo). En realidad, la propina es siempre apreciada.
Asia
En Laos, Indonesia, Birmania, Malasia y Singapur, la propina no forma parte de las normas sociales. Aun así, un pequeño favor será apreciado. En Birmania, por ejemplo, evite dar dinero. Considere en cambio un pequeño regalo. En Malasia, en cambio, se prefiere el dinero. En Indonesia, la propina suele estar incluida en la factura. Sin embargo, cuando se trata de porteros de hotel, se recomienda dar algo de dinero extra. En Tailandia, en principio, no existe la cultura de las propinas. Pero las cosas están evolucionando con la presencia de extranjeros. En los lugares turísticos, es posible que haya que dar una propina.
Otros países
En Argelia, la propina depende de ti. Pero un poco de dinero extra siempre se agradece. En Australia, la propina está incluida en la factura (10% en impuestos). Pero si se siente realmente agradecido por el servicio, no dude en añadir algo de dinero extra. Al igual que en Australia, los establecimientos brasileños incluyen la propina en la propia cuenta como impuestos adicionales. Pero, si no estás satisfecho con el servicio, puedes negarte a pagar estos impuestos.
Países en los que se recomienda dejar propina
Esta lista es más larga que la anterior.
Europa
En Bélgica, Bulgaria, Alemania, España, Grecia, Irlanda, Italia, Malta, Eslovaquia y Turquía, la propina será más que bienvenida. En Turquía, por ejemplo, la propina no está incluida en la cuenta, pero se aconseja redondear la cifra. Desde el punto de vista geográfico, Turquía está en la encrucijada de Europa y Asia. De ahí que forme parte de Europa, por lo que la cultura también será bastante similar. También en Grecia se acostumbra a redondear la cuenta (al siguiente euro, por supuesto). Aunque las propinas están incluidas en las facturas búlgaras, españolas y belgas, siempre se agradece un poco más. Lo que hay que saber es cómo darla exactamente. En Alemania, no dejes el dinero sobre la mesa. Indica el importe de su propina cuando pagues. Esto determinará tu nivel de generosidad. En Hungría y en la República Checa, también se trata de tu generosidad. En estos países, se recomienda encarecidamente dejar propina.
Asia
En Dubai, Israel, Palestina, Camboya, India, Sri Lanka, Tíbet, Nepal y Vietnam, se recomienda dar propina, especialmente en las zonas turísticas. En Camboya, por ejemplo, no es tradicional la cultura de las propinas, pero las cosas están cambiando con el turismo. En Sri Lanka, los empleados de turismo a veces incluso esperan una propina. En Dubai, Palestina e Israel, la propina puede estar incluida en la factura. Pero una pequeña muestra de agradecimiento por el buen servicio siempre será bienvenida.
África
Kenia, Senegal, Sudáfrica, Tanzania, Mauricio, Madagascar, Túnez y Marruecos son países en los que la etiqueta de la propina forma parte del sector turístico. Se recomienda dejar propina en restaurantes, bares, hoteles, para los servicios de seguridad, los porteros de los hoteles, los guías turísticos, etc. La propina puede estar ya incluida en la factura, como ocurre en Mauricio. Pero siempre se puede dejar un 5-10% adicional como muestra de satisfacción. En Tanzania, hay que dar propina a los maasai para hacerse fotos con ellos. Al fin y al cabo, están actuando como modelos para tus álbumes de fotos digitales y cuentas de Instagram. En Egipto, las propinas son muy recomendables. Prepárate para dar un 10% de propina a los taxistas, los porteros de los hoteles, los mozos de equipaje y otros empleados del sector turístico.
América del Sur
En Argentina, Bolivia, Brasil, Ecuador, Guatemala, Perú, República Dominicana, Uruguay y Venezuela también se recomienda dejar propina. Incluso es muy recomendable en Chile y Cuba (10% de la cuenta). Aunque a veces se incluye en la cuenta en Chile, no hay que ignorarla. En Cuba, es mejor dejar un poco más, ya que la gente no dudará en señalarlo. Hay que pagar un 10% más de la cuenta, incluso cuando el servicio está incluido. En Perú, por ejemplo, la propina es voluntaria pero se recomienda si se ha disfrutado del servicio.
Países en los que la propina es obligatoria
"Obligatorio". Es una gran palabra. Nadie te meterá en la cárcel si no das una propina en los países mencionados a continuación. Pero a pesar de que la propina es ajena a la cultura japonesa, forma parte de la cultura de Inglaterra, Escocia, Austria, Rumanía, Canadá, Estados Unidos y México, a veces por razones puramente económicas. En Inglaterra, Rumanía, México y Estados Unidos, los camareros están mal pagados. Para ellos, la propina es un complemento fundamental de su salario. En Inglaterra, la propina debe ser del 10-15% de la cuenta, como en Rumanía. En México, la propina es del 10-20% de la cuenta. Pero si la propina ya está incluida en la cuenta, no es necesario dar dinero extra, aunque siempre será bienvenido. En Estados Unidos, hay que prever una propina del 15-20% de la cuenta (este porcentaje varía ligeramente según el tipo de establecimiento). Esta norma está arraigada en la cultura local desde hace mucho tiempo. Así que hay que dejarse llevar por la corriente. Incluso se puede pagar la propina con tarjeta de crédito.
En todos estos países, la propina es una obligación de facto. Es una costumbre a la que todo el mundo se adhiere. En Austria, como en Alemania, hay que indicar el importe de la propina antes de pagarla. En Escocia, la propina es una costumbre en los restaurantes, pero no en los pubs. En Canadá, hay que prever una propina del 10-15%, a menos que ya esté incluida en la factura.
¿De dónde viene la cultura de las propinas?
Nadie lo sabe realmente, pero se rumorea que empezó en la Inglaterra del siglo XVIII. Para atender a los clientes que tenían prisa, el dueño de un restaurante había dispuesto un tarro "para asegurar la rapidez" (de ahí el acrónimo "tip"). Los que tenían prisa echaban monedas en la jarra para que les sirvieran primero. Así nació la cultura de las propinas. La costumbre ha viajado a otros países y épocas, para bien o para mal. Aunque a menudo pensemos en ella como un pequeño gesto de agradecimiento, la propina es a veces una parte integral del salario de un empleado. En los años 60, el Congreso estadounidense tuvo la extraña idea de crear una ley que permitiera a las empresas pagar a algunos de sus empleados por debajo del salario mínimo. El resto de su salario se cubriría con la propina. Esto explica la situación actual de muchos trabajadores estadounidenses, que se ven obligados a lidiar con salarios muy bajos, que se complementan con las propinas. Esto debería facilitar la comprensión de la importancia de este pequeño dinero extra que se deja en la cuenta.
