Toda la información que necesita para vivir en Eritrea.
Las zonas arqueológicas cuentan mucho sobre la historia del país. Entre la población de alrededor 5.6 millones de personas, se observa un amplio rango de grupos étnicos, los islámicos y los cristianos son las dos principales religiones del país, las cuales son practicadas con tranquilidad. La zona altiplano (donde se encuentra la capital de Eritrea, Asmara) predomina el cristianismo, mientras que en la población que vive en la zona baja y en las costas, es el islamismo la religión practicante.
Aunque son 11 lenguas las que se hablan por todo el país ' nueve de ellas son indígenas- no existe un idioma oficial. Tigriña, árabe e inglés son los más comúnmente hablados en las zonas comerciales, y aprender Tigriña puede ser muy útil si se desea trabajar en Eritrea, ya que es hablado por más de la mitad de la población y tiene su propio alfabeto. Como dato interesante, alrededor de finales de los años 1800, miles de campesinos italianos se establecieron y permanecieron en Eritrea hasta finales de la conquista italiana en 1941. Como resultado de esto, muchos eritreos de avanzada edad hablan italiano, y es un idioma comúnmente entendido por la población joven.
A pesar de la tensión política y de su naturaleza de cultura irresistible, Eritrea es uno de los países más reservados en el mundo, y caen al final del ranking de la Libertad de Medios Mundial. No existen medios locales privados y periodistas internacionales no son bienvenidos a menos que accedan a únicamente escribir reportajes favorables.
Eritrea es también productor de oro, y gracias a sus recursos naturales la minería se espera que se convierta en una importante fuente de ingresos y crecimiento para el país, que está atrayendo a compañías y expatriados a este sector. El art-deco de la ciudad de Asmara puede ser particularmente atractiva para los extranjeros que trabajan en el sector de la educación, así como el inglés se está rápidamente convirtiendo en el idioma extranjero de preferencia por la Universidad de Asmara, y sus centros de investigación podrían también ofrecer potenciales ofertas trabajo.