Abrir una cuenta bancaria en Panamá
Abrir una cuenta bancaria es parte natural del proceso de vivir en un nuevo país. Proporciona comodidad, simplifica las cosas e incluso puede ahorrarte dinero. Panamá tiene un sector bancario sofisticado y si bien las cosas no se pueden hacer exactamente igual desde dónde te estás mudando, es bastante fácil ponerse en marcha de una manera que te permita conducir tu negocio financiero sin los dolores de cabeza ocasionales asociados con tener todo tu dinero a miles de kilómetros de distancia, y diferentes zonas horarias.
Este artículo se refiere principalmente a la creación de servicios bancarios personales y si tienes un negocio que atender, es de vital importancia hablar con un contador panameño al respecto.
La elección del banco correcto
La elección de un banco puede, dependiendo de tu ubicación, verse influida por las sucursales que sean convenientes para ti. Hay muchos para elegir, incluidos los nombres que puedes reconocer. Santander y Scotiabank están aquí, por ejemplo, junto con nombres comunes en América del Sur y Central. No todo será apropiado, por lo que vale la pena tener una charla preliminar, preferiblemente en una sucursal en lugar de hacerlo por teléfono. Mientras que algunos, particularmente aquellos con un alcance global, pueden tener personal que habla inglés, otros no, y es más fácil poner las cosas cara a cara en lugar de hablar por teléfono.
Como siempre, el boca a boca y la experiencia personal pueden apuntarte en la dirección correcta y ayudar a evitar trampas, así que habla con otros expatriados al respecto, en particular con aquellos cuyas circunstancias son muy similares a las tuyas.
Un banco panameño que a algunas personas les resulta fácil tratar (y su sitio web está en inglés) es Multibank, pero las personas deben averiguarlo por sí mismas.
Abrir una cuenta bancaria en Panamá
Una vez que hayas elegido un banco que marque todos los casilleros correctos, deberás llevar todos tus documentos: pasaporte y una segunda forma de identificación, prueba de ingresos (incluso un contrato si tienes uno pero tiene aún no has comenzado a trabajar) y registros financieros recientes de tus cuentas existentes. También necesitarán una referencia de un banco en otro lugar y una referencia personal de alguien en una capacidad oficial reconocida. Una persona panameña sería ideal, pero el banco comprenderá que, si acabas de llegar o has establecido una relación con el país, eso puede ser imposible.
También deberá poder depositar al menos $1,000 para abrir una cuenta.
Una vez que se hayan completado los trámites y se haya completado el proceso de configuración (que puede demorar varias semanas), podrás operar normalmente, con una tarjeta de débito, tarjeta de crédito y las credenciales locales que hacen mucho más fácil hacer negocios en el país.
Es bueno saberlo:
Eres, por supuesto, libre de retener los servicios bancarios en tu país de origen o en cualquier otro lugar que funcione para ti, y tu contador te informará sobre cualquier implicación fiscal relacionada con esto.