Historia de Singapur
El pequeño estado nación de Singapur es conocido por el mundo como un símbolo implacable de eficacia y dinamismo. Antigua colonia británica, el país ha desempeñado un papel clave en la región como un puerto comercial y ha contribuido significativamente a los esfuerzos de los británicos en el sudeste asiático. A través de los siglos, Singapur se ha convertido en una nación multifacética, y la fantástica historia de esta pequeña pero grande nación comienza en el siglo XIV.
Historia temprana
La leyenda dice que en el siglo XIV un príncipe de Sumatra aterrizó en la isla y vio una bestia que él consideró que era un león. Aunque la bestia haya sido probablemente un tigre malayo, él nombró la isla "Singapura" basada en las palabras malayas "Singa", que significa león (sí, como la cerveza de Singha) y "Pura" que quiere decir ciudad. Este descubrimiento inició una impresionante historia que culmina hoy en una de las historias de éxito internacional del crecimiento y desarrollo nacional. No es de sorprender que el león, o más específicamente el "Merlion" o león marino (una criatura imaginaria, con la cabeza de león y cuerpo de pez), haya llegado a simbolizar Singapur, representación que se puede ver en el muelle cerca del distrito financiero. Singapur fue el hogar de un pueblo de pescadores malayo y fue habitada por un grupo denominado Orang Laut. La ubicación de Singapur en la intersección de las rutas marítimas la convirtió en un punto de encuentro para buques de China, Arabia y Portugal y la importancia estratégica de la isla se hizo evidente rápidamente a medida que el comercio internacional comenzó a florecer.
Los británicos en Singapur
En 1818, la importancia del comercio y la política en Asia llevó a los británicos a nombrar al general Sir Stamford Raffles para establecer una estación comercial en Singapur. Sir Raffles eventualmente jugaría un papel importante en la configuración del destino de Singapur y hasta el día de hoy es omnipresente en el país, con hoteles históricos y calles que llevan su nombre. Se hizo cada vez más importante para los británicos establecer un puerto en Singapur dada la creciente importancia de la India dentro del Imperio y el creciente comercio con China. Se hizo evidente que se necesitaba un puerto para proteger su flota y detener las políticas expansionistas de los holandeses en el sudeste asiático, y Singapur proporcionó una ubicación ideal.
Eventualmente, Singapur se convirtió en un elemento importante de la ruta de las especias y fue importante tanto en términos de su papel militar como en su rol comercial. El crecimiento de Singapur no se produjo sin problemas relacionados con la ley y el orden, y en respuesta Sir Stamford Raffles implementó el llamado Plan Raffles Town. Singapur se subdividió en cuatro áreas basadas en líneas étnicas y económicas. Una ciudad europea fue establecida para los comerciantes europeos, los eurasiáticos y los comerciantes asiáticos ricos, mientras que los chinos fueron relegados a Chinatown, que todavía existe.
La Segunda Guerra Mundial
En diciembre de 1941, los japoneses atacaron e invadieron Singapur. La invasión se produjo desde el norte de Singapur y dejó al mando británico sin otra opción que rendirse. La envergadura del ejército aliado en Singapur hizo de este evento la mayor rendición en la historia militar de Gran Bretaña y fue considerado como un tremendo golpe por el primer ministro Winston Churchill. Singapur había sido considerado previamente inexpugnable y el acontecimiento envió temblores hasta el final a la Oficina de Guerra en Londres. Los japoneses controlaron Singapur pero se entregaron tras el final de la guerra y la derrota de Japón en manos de los aliados. Los británicos se hicieron cargo, hasta que el nacionalismo y los cambios en la política internacional dirigieron a Singapur hacia la independencia.
La independencia de Singapur
El creciente nacionalismo permitió que el Partido de la Acción del Pueblo de Singapur asumiera el poder en 1959. El Partido Acción Popular estuvo encabezado por Lee Kuan Yew, el primer primer ministro de Singapur y una figura venerada hasta el día de hoy. Singapur se fusionó con su vecino más grande, Malasia, hasta que este último adquirió su propia independencia en 1963. Sin embargo, la unión fue de corta duración y en 1965 Singapur se convirtió en una nación soberana en sí misma. Al igual que muchos países recientemente independendizados, Singapur se encontró con sombrías perspectivas económicas. La división de Singapur de Malasia y el posicionamiento militarista de Indonesia resultaron en graves problemas económicos para la nueva nación. Sin embargo, el líder de Singapur, Lee Kwan Yew, no se sintió perturbado por la situación cada vez más difícil. El país se centró en el desarrollo económico y se centró en las exportaciones, la industrialización y alentó la entrada de capital extranjero mediante el incentivo de la inversión. En este proceso, Singapur potenció su ubicación estratégica de una de las vías marítimas más concurridas del mundo. Aunque la localización de Singapur se menciona a menudo como la piedra angular de su éxito, la respuesta verdadera reside en el liderazgo visionario, la determinación y la naturaleza trabajadora de los singapurenses nuevamente independientes. Hasta el día de hoy, el valor del trabajo duro y la humildad se celebra en el país. En las décadas de 1970 y 1980, Singapur experimentó un rápido crecimiento económico y una vez más la visión de Lee Kwan Yew fue fundamental para prevenir los problemas sociales a menudo asociados con el rápido crecimiento. El gobierno estableció esquemas de vivienda subvencionada, un sistema educativo de primera categoría y servicios de salud apoyados por el Fondo Central de Previsión, que hasta el día de hoy sigue siendo una piedra angular del sistema de seguridad social de Singapur.
El dinamismo de Singapur y su capacidad para adaptarse y seguir sucesivas tendencias y olas económicas continuaron a lo largo de los años 90, ya que Singapur dirigió su economía hacia industrias manufactureras y de alto valor agregado. El país también se aseguró de desarrollar una fuerza de trabajo plenamente familiarizada con las tendencias observadas en Tecnología de la Información. Hoy, Singapur es un centro de innovación en el sector. Paralelamente a su creciente influencia económica, Singapur desarrolló un sector financiero y de servicios y es uno de los principales centros financieros asiáticos después de Tokio y Hong Kong.
Singapur es una verdadera historia de éxito. A pesar de su tamaño y los problemas que podrían derivar de su naturaleza multicultural, Singapur desafió las adversidades varias veces para convertirse en uno de los lugares más innovadores y dinámicos en la tierra. Su formulación de políticas y su flexibilidad rara vez es igualada por otros países, y el país se ha convertido con razón en un modelo para el desarrollo económico y social.