Transporte público en Sevilla, Conducir en Sevilla
Aunque la historia de la capital de Andalucía remonta al siglo VIII antes de Cristo, su sistema de transporte público es todo menos antiguo. Con un servicio de tranvía, metro, carriles bici, taxis y una extensa red de autobuses que conecta el centro de la ciudad con cada vecindario, Sevilla es una ciudad muy fácil de recorrer.
Moverse por Sevilla en coche
Los niveles máximos de congestión entre semana, cuando la ciudad se pone a trabajar, suelen darse entre las 7.30 y las 9 de la mañana, entre las 2 y las 3 de la tarde y de nuevo entre las 6 y las 8 de la tarde. Si vas y vienes del trabajo en coche, espera añadir 12 minutos a tu tiempo de viaje por cada 30 minutos que pases en tu vehículo. Durante las horas punta de la tarde, pasarás diez minutos más en tu coche por cada 30 minutos en la carretera.
Moverse por Sevilla en metro
Una forma relativamente fácil y eficiente de ir y volver del trabajo es en metro. La línea 1 conecta la ciudad y su área metropolitana por 21 estaciones repartidas en tres zonas tarifarias. Se planean más líneas en el futuro.
A día de hoy, un billete de ida y vuelta en una zona cuesta 2,70 €, en dos 3,20 € y 3,60 € si pasa por las tres zonas. Sin embargo, hay varias maneras para ahorrar en tus desplazamientos en metro.
Por ejemplo utilizando una tarjeta de viaje de un día que ofrece un número ilimitado de viajes por 4,50 € o el Bono Plus 45. Que te permite realizar 45 viajes del mismo tipo durante un período máximo de 30 días a partir de la fecha de compra.
El costo del Bono Plus 45 es de 30 euros, 42 € o 50 €, por una, dos o tres zonas respectivamente.
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Moverse por Sevilla en autobús
Los autobuses son otra forma rápida y eficiente de moverse por Sevilla. Los kilómetros de carriles bus segregados facilitan tus desplazamientos por carreteras congestionadas durante las horas punta. Los billetes sencillos cuestan 1,40 €. Una opción más barata es comprar una tarjeta de viaje recargable de 30 días o de estudiante. Los detalles de precios, líneas y horarios están disponibles en la página oficial de TUSSAM (Transportes Urbanos de Sevilla).
Moverse por Sevilla en tranvía
El servicio de tranvía de la ciudad tiene solo una línea y opera en el centro de la ciudad, entre Plaza Nueva y San Bernardo. Hay cinco estaciones a lo largo de su trayecto de dos kilómetros. El precio del billete sencillo es de 1,40 €.
Moverse por Sevilla en bicicleta
Sevilla es una ciudad relativamente plana y adecuada a la práctica del ciclismo. Hay aproximadamente 180 kilómetros de carriles bici en Sevilla. Reconocible por su color verde, están separados del tráfico de vehículos por bordillos elevados y vallas.
Junto a esta red de bicicletas en constante expansión existe un servicio público de alquiler de bicicletas con miles de bicicletas unisex disponibles en 263 estaciones repartidas por toda la ciudad. Registrarse en el sistema cuesta 13,33 euros para un plan de 7 días. Los primeros 30 minutos son gratis, después se paga 1,03 euros por la primera hora y 2,04 euros por hora por cada hora siguiente. También puedes alquilar una bicicleta sólo por un día. Con este plan, pagas 2,59 euros por registrarte. También hay abonos a largo plazo. Consulta la web de SEVici para más detalles.
Moverse por Sevilla el fin de semana
La red de transporte público de Sevilla funciona durante todo el fin de semana y se circula más fácilmente en coche, ya que hay poca o ninguna congestión. Si tus planes para el fin de semana es relajarte en el centro de la ciudad, es buena idea dejar el coche aparcado. El corazón de la ciudad se recorre fácilmente a pie.
Acceso al transporte público para personas con discapacidad
En general, Sevilla es una ciudad accesible para ir con silla de ruedas. Los autobuses tienen una rampa de acceso para las sillas de ruedas, y la red de metro está perfectamente adaptada a las necesidades de las personas con movilidad reducida. Las estaciones están diseñadas sin obstáculos ni barreras, y tienen ascensores que conectan la calle con las plataformas y los pasillos. La distancia entre el tren y la plataforma es la mínima requerida para sillas de ruedas y en todos los trenes hay asientos reservados para personas con movilidad reducida.
Otros servicios accesibles incluyen estacionamientos con espacios reservados para personas con movilidad reducida y máquinas de venta autómatica accesibles que también están en braille para invidentes.
En el caso de los tranvías, los suelos son bajos y los vagones equipados con cuatro lugares de asiento prioritarios y dos lugares para sillas de ruedas, bicicletas y carritos de bebés.