Requisitos para entrar y vivir en Francia
Tanto si piensas instalarte en Francia por unos meses como si lo haces de forma indefinida, descubrirás un país marcado por su diversidad, su cultura y su historia. Una vida entera no sería suficiente para apreciar todos los tesoros que ofrece una nación que se enorgullece de sus tradiciones.
En los últimos años, trasladarse a Francia ha resultado más fácil gracias al desarrollo de programas de visado para empresarios y a la gran cantidad de oportunidades disponibles para trabajadores altamente cualificados.
El hecho de pertenecer al espacio Schengen es también un fuerte argumento de venta para Francia, ya que con un solo visado es posible descubrir la inmensidad y los fabulosos tesoros de países como Alemania, Italia, España o Portugal, por citar sólo algunos.
Entrar en Francia
Existen varias opciones de transporte para llegar a Francia desde la Unión Europea. Al no haber controles aduaneros dentro de la UE, se puede conducir hasta Francia sin preocuparnos de los largos controles fronterizos. Francia y el resto de Europa cuentan con autopistas bien desarrolladas, y la construcción de autopistas de peaje facilita a los europeos conducir de un país a otro, aunque los peajes en sí pueden ser bastante caros.
También se puede llegar a Francia en tren. En los últimos años, los operadores de los distintos países se han coordinado para que los viajes entre los estados europeos estén cada vez más integrados. Por ejemplo, se puede viajar fácilmente de París a Turín, Ámsterdam o Bélgica en tren. A muchas de las principales ciudades europeas se puede llegar con un viaje directo en tren. Si no es así, siempre se puede tomar un tren de conexión, que no suele ser un inconveniente.
Además, muchos jóvenes europeos compran un pase de tren europeo, que les da acceso ilimitado a la red, para descubrir las bellezas históricas y culturales del viejo continente. Los trenes Eurostar también son una forma muy cómoda de viajar hacia y desde el Reino Unido. Aunque la oferta Eurostar Snap (que ofrecía billetes de última hora a precios atractivos) ya no existe, la compañía sigue ofreciendo billetes baratos que pueden reservarse con antelación.
Si vienes de lejos o tienes un presupuesto ajustado, puede ser más barato volar a Francia. La compañías aéreas de bajo coste no faltan en Europa, como Ryanair, Easyjet, Air Berlin, Norwegian y Transavia (de nuevo, sólo por nombrar algunas). Ofrecen billetes de bajo coste a numerosos destinos europeos. La mayoría de las grandes ciudades francesas cuentan con aeropuertos internacionales, y en los últimos años han surgido varios aeropuertos más pequeños en ciudades más alejadas gracias a la llegada de las compañías de bajo coste.
Por otro lado, Francia cuenta con una multitud de compañías aéreas tradicionales, y es muy fácil llegar a cualquier aeropuerto importante a través de los servicios de Air France, KLM o alguno de sus socios. También hay que tener en cuenta que algunas compañías, por ejemplo Air Transat o Corsair, ofrecen precios extremadamente bajos.
Cabe destacar también la creciente conciencia ecológica en Francia. Se denuncian los aeropuertos pequeños y poco rentables. Varios de ellos sólo pueden sobrevivir con dinero público, a pesar de los esfuerzos por atraer vuelos de bajo coste. Estos vuelos también están en el punto de mira del Gobierno francés, que ha optado por favorecer el ferrocarril frente al avión para los vuelos nacionales. Aprobada en 2021, la Ley de Clima y Resiliencia prohíbe los vuelos nacionales en Francia para los trayectos "también [operados] en la red ferroviaria nacional sin conexiones [de] una duración inferior a 2 horas y 30 minutos". A partir de 2020, Air France ha cancelado 3 rutas nacionales para poder beneficiarse de las ayudas estatales. Sin embargo, el decreto de aplicación publicado en mayo de 2023 incluye numerosas excepciones.
Trámites administrativos para vivir en Francia
Los ciudadanos de la UE, el EEE y Suiza pueden vivir y trabajar en Francia siempre que dispongan de un documento de identidad o un pasaporte válidos. Es decir, los nativos de estos países pueden literalmente hacer las maletas y trasladarse al país para trabajar o incluso montar un negocio, sin necesidad de un permiso de trabajo o residencia. Después de cinco años, es posible solicitar la residencia permanente. No olvides que hay normas específicas que regulan cuestiones como el seguro médico o las prestaciones de desempleo para los nacionales de la UE y el EEE.
Si no perteneces a la UE, al EEE, a Suiza, Andorra, Mónaco, la Ciudad del Vaticano o San Marino, debes tener un pasaporte válido y solicitar un visado de larga duración para poder instalarte en Francia. Es importante recordar que deberás solicitar un visado antes de viajar a Francia. Los documentos que debes aportar suelen variar en función del motivo de tu estancia y es aconsejable que te informes previamente en la embajada o consulado francés de tu país. Una vez que hayas vivido legalmente en Francia durante cinco años ininterrumpidos, podrás solicitar un permiso de residencia de larga duración.
Los ciudadanos de determinados países, además de la UE, el EEE, Suiza, Andorra, Mónaco, el Vaticano y San Marino, pueden beneficiarse de exenciones siempre que estén en posesión de un permiso de residencia o un Document de circulation pour étranger mineur (DCEM). El Titre d'identité républicain (TIR) ya no se expide desde 2019. Ha sido sustituido por el DCEM.
El permiso de residencia está destinado a los extranjeros (no franceses) que cumplen todas las condiciones requeridas para ser autorizados a residir en Francia de forma permanente. El DCEM está destinado a los menores que viven en Francia y desean viajar al extranjero. Para más información, no dudes en consultar nuestros artículos dedicados a los visados.
Enlaces de interés:
Service Public - Visado de larga duración