En tu nueva aventura en los Países Bajos necesitarás encontrar trabajo. No encontrar trabajo antes de trasladarse puede ser desalentador pero, en algunos casos, necesario. Si no llegas a Ámsterdam con un contrato de tu empresa actual, querrás saber cómo funciona el mercado laboral aquí.
Trabajos disponibles en Ámsterdam
Al principio, es posible que quieras conseguir un trabajo de camarero en un bar o restaurante para poder llegar a fin de mes mientras terminas de instalarte. Afortunadamente, Ámsterdam es un lugar estupendo para este tipo de trabajos, ya que la mayoría ni siquiera requieren que hables holandés. De hecho, cada vez aparecen más espacios en los que los empleados sólo hablan inglés, por lo que deberías poder encontrar fácilmente un trabajo en el sector de la alimentación, sobre todo cuando es temporada alta en verano. Esto es aún más cierto después de la pandemia, ya que la gente renunció o fue despedida en masa cuando se produjeron los cierres, y ahora, los establecimientos vuelven a necesitar personal ya que el negocio sigue como siempre.
En el caso de los empleos más cualificados, algunos sectores son mejores que otros para los expatriados. En general, si se quiere empezar una carrera en Ámsterdam, en los campos de los medios de comunicación, el marketing, los servicios financieros y las tecnologías de la información es más fácil encontrar.
Para otros sectores, sigues teniendo más posibilidades de encontrar un trabajo en Ámsterdam que en otras ciudades europeas. Muchas empresas (incluidas las de EE.UU. y el Reino Unido) tienen sucursales en el extranjero, por lo que puedes pedir un traslado desde tu lugar de origen o solicitar un puesto de trabajo en Ámsterdam.
Salarios en Ámsterdam
Si vienes de Estados Unidos, por ejemplo, el sueldo puede no parecer muy alto en los Países Bajos. Para los mayores de 21 años, a partir del 1 de enero de 2024, el salario mínimo es de 13,27 euros por hora. Obviamente, para los empleos más cualificados, las empresas ofrecerán salarios más atractivos.
También puedes acogerte a lo que se llama la norma del 30%. A partir de enero 2024, si te han contratado a más de 150 kilómetros de la frontera holandesa y tu salario anual es de al menos 46.107 euros (o 35.048 euros si tienes un máster y eres menor de 30 años), puedes acogerte a esta normativa.
Con la regla del 30%, tu salario contratado se reduce en un 30%. Sin embargo, la cantidad del 30% se considera una desgravación libre de impuestos. Este dinero está destinado a cubrir los gastos que te ha supuesto el traslado por tu trabajo.
Antes se podía reclamar el beneficio del 30% durante ocho años, pero en enero de 2019 se redujo a cinco años. Además, se han aprobado más leyes que hacen que la desgravación sea aún menos generosa. A partir del 1 de enero de 2024, se podrá obtener la exención del 30% durante un máximo de cinco años, y solo durante los primeros 20 meses. Los 20 meses siguientes se reduce al 20% y los 20 siguientes al 10%. Además, ahora existe un límite máximo de 233.000 euros de ingresos por trabajo, lo que significa que si ganas más, no hay desgravación por el exceso.
El Belastingdienst tiene más información sobre los matices de la regla del 30%.
¿Cómo de competitivo es el mercado laboral en Ámsterdam?
La competitividad del mercado de trabajo de Ámsterdam depende del ámbito en el que te muevas y de los idiomas que hables. Si te parece bien un empleo en el sector de la alimentación, probablemente no te encontrarás con muchos obstáculos, incluso sin saber el idioma holandés. De hecho, las oportunidades abundan en los servicios de alimentación y en el comercio minorista, ya que muchos lugares tienen dificultades para cubrir puestos.
En general, puedes desenvolverte bastante bien sólo con el inglés, pero tener conocimientos de neerlandés es sin duda una ventaja. Si sabes hablar francés o alemán, te será más fácil encontrar empleo en empresas internacionales. Los idiomas escandinavos están especialmente solicitados, por lo que si eres nativo, te resultará bastante fácil conseguir un empleo.
Otra cosa que tienes que tener en cuenta es que las empresas holandesas tienen que demostrar que han intentado contratar en Holanda y no han tenido éxito antes de contratar en el extranjero. Por eso, si no eres ciudadano de la UE, estás en gran desventaja con respecto a los trabajadores holandeses nativos.
Además, en la mayoría de los casos, los empresarios tendrán que tramitar un visado de trabajo en tu nombre, así como ser tu patrocinador. Estos inconvenientes y costes adicionales pueden hacer que la contratación de trabajadores extranjeros sea menos atractiva que la de nativos.
Nos esforzamos para que la información proporcionada sea precisa y actualizada. Sin embargo, si observas errores, no dudes en comunicárnoslo dejando un comentario abajo.