Si te has decidido por Lisboa, no te decepcionará su oferta de ocio y cultural. Una ciudad vibrante y que propone multitud de eventos en los que disfrutar de la capital lusa.
Cuidado con los lunes
Es importante recordar, antes de planificar cualquier excursión, que algunos museos y otras atracciones de Lisboa están cerrados los lunes, así que infórmate siempre antes de aventurarte. Un lugar que no cierra es el Oceanário de Lisboa, el mayor acuario cubierto de Europa. Situado en el moderno y llamativo Parque das Nações, es fácilmente accesible en metro (estación de Oriente) y en autobús: un buen reclamo para los fines de semana o las vacaciones.
Además del acuario, Lisboa alberga algunos museos increíbles que muestran obras de diversas áreas, como el arte, la arquitectura y la historia. El Museu de Arte Antiga y la Fundación Gulbenkian son dos de las mejores opciones para un fin de semana de arte o una pausa de inspiración a mitad de semana: el Gulbenkian también ofrece conciertos y obras de teatro clásicas.
Ninguna capital europea estaría completa sin un castillo, y Lisboa no falla en este aspecto. El majestuoso Castelo de São Jorge se alza orgulloso sobre el centro de Lisboa y ofrece unas vistas incomparables de la ciudad. El hecho de que los lisboetas puedan acceder al castillo de forma gratuita con una prueba de residencia es la guinda del pastel. Mejor visitarlo entre semana para evitar las multitudes del fin de semana.
Buscar una panadería
No debería ser difícil: decir que las panaderías son omnipresentes en Lisboa sería quedarse corto. Disfruta de un café y un pastel para un desayuno rápido entre semana. A los portugueses les encantan los dulces, así que no tardarás en encontrar tu favorito. Y no olvides hacer también una pausas para el café de la tarde...
Explorar
Te recomendamos hacer un viaje en el tiempo y recorra algunos de los barrios más antiguos de la ciudad. Alfama no tiene rival en cuanto a historia y esplendor; pasa un par de horas perdiéndote, explorando las serpenteantes calles laterales y descubriendo las joyas secretas de la zona. A los portugueses les encanta pasear por su ciudad, y es seguramente la mejor manera de descubrir lo más auténtico Lisboa.
Durante los fines de semana, toma el tren para relajarte en una de las playas de Lisboa o explore ciudades vecinas como Sintra, Cascais, Mafra o Ãvora.
Disfrutar de las vistas
Una de las mejores maneras de terminar el día y dar la bienvenida a la noche es subir a un mirador (miradouro), tomar una copa de vino y sentarse a relajarse mientras el sol se pone mágicamente. Encontrarás estos miradores repartidos por toda Lisboa, pero el Miradouro da Graça es sin duda uno de los mejores, tanto para los lisboetas como para los turistas. Entre semana puedes pedir sólo un espresso, mientras que el fin de semana puedes dar lel gusto de una copa de vino.
Comer, beber y ser feliz
En Lisboa, no tendrás ningún problema para hacer las tres cosas. Los restaurantes y bares cobran vida durante el fin de semana y, cuanto más cerca del centro se encuentre, más tiempo permanecerán abiertos los bares y restaurantes. Aquellos que busquen un fin de semana vibrante, con una bulliciosa mezcla de bares y restaurantes, no deben buscar más allá del Bairro Alto, mientras que los quieren más, deben dirigirse directamente a la calle Rosa (Cais do Sodré), donde los bares están abiertos hasta las 5 de la mañana.
Entre semana, los portugueses prefieren la comodidad de una tasca cercana.
Esta colección de sugerencias es sólo la punta del iceberg. Lisboa está absolutamente repleta de cosas para hacer todos los días de la semana, sean cuales sean tus gustos e intereses, encontrarás un buen plan.
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