Primeros pasos en Melbourne
Melbourne es una ciudad vibrante y fascinante, caracterizada por su oferta artística, gastronómica y creativa. No es de extrañar que Melbourne esté creciendo rápidamente, hasta el punto de superar en cualquier momento a Sydney como la ciudad más grande de Australia. Muchos estudiantes y expatriados procedentes de todo el mundo quedan fascinados por sus playas, su cultura gastronómica y su estilo de vida relajado.
Clima
Melbourne es la capital del estado de Victoria. Se encuentra en la costa sureste de Australia. Y goza de un clima oceánico subtropical con vientos frecuentes y veranos abrasadores. A pesar de que está en Australia, no creas que en Melbourne hace calor todo el año. No podrías estar más equivocad, porque en invierno sí hace frío en Melbourne. Debido a las masas de aire frío que rodean la Antártida, la temperatura varía hasta tal punto que se suele decir que en Melbourne se pueden vivir 'cuatro estaciones en un día'. Sea cual sea la temporada del año, te recomendamos siempre llevar un paraguas, un chubasquero. Lo mejor es llevar varias capas de ropa e ir quitándolas a medida que sale el sol.
El agujero en la capa de ozono explica por qué el verano en Melbourne puede ser abrasador, con temperaturas que alcanzan los 42 grados Celsius. El protector solar es una necesidad absoluta, en días calurosos no te plantees salir sin protección o tu piel sufrirá las consecuencias. La primavera es la estación más húmeda con más de diez días de lluvia al mes entre septiembre y noviembre. La época ideal para visitar Melbourne es entre diciembre y febrero, cuando los días soleados son más frecuentes. El otoño, sin embargo, trae nuevos colores y da otra imagen a la ciudad. También es buen momento para descubrirla, las temperaturas aún son calientes y las noches refrescan.
Vida social
Melbourne es una ciudad dinámica con un calendario social repleto durante todo el año. El mejor momento para disfrutar de los bares y restaurantes es sin duda el verano, cuando todos salen a comer y tomar una bebida fresca al sol. En esta época los parques de la ciudad se llenan de personas que hacen un picnic y disfrutan del clima cálido típico el verano. En cambio, en invierno, los habitantes tienden a regresar al calor de sus hogares, ya que el frío no les entusiasma demasiado. Éste puede ser el momento ideal para salir y probar algunos restaurantes populares que están llenos el resto del año. Sea cual sea la temporada, ¡tener una vida social en Melbourne es posible durante todo el año! Incluso podrás disfrutar de mercados nocturnos, tanto en invierno como en verano. También es sede de algunos eventos deportivos considerables, como el Open de Australia de tenis en verano, el Gran Premio de Fórmula 1 y el Rip Curl Pro Bells Beach de surf en otoño.
Naturaleza
Melbourne es una gran ciudad, pero cuenta con muchos parques y playas para escapar de la vida urbana. Tienes varias opciones a tu disposición para conectar con la naturaleza: el Real Jardín Botánico en el centro de la ciudad o los 26 hectáreas de los jardines Fitzroy, por ejemplo. Las playas St Kilda y Brighton Beach son fáciles de acceso pero muy turísticas. Si puedes, aléjate de la ciudad y visita Mount Martha o Sorrento Beach, donde te espera un océano increíblemente bonito y limpio.
A mucha gente le encanta el surf en el estado de Victoria, hay muchas playas en la costa donde puedes surfear.
Sin embargo, en esta zona donde el surf es muy popular, no se deben subestimar las corrientes y las aguas agitadas. Lo mejor es mantenerse siempre dentro de las banderas rojas y, si no hay nadie en la playa, quédate en las zonas más seguras.
Justo fuera de Melbourne, te esperan paisajes impresionantes como los viñedos de Red Hill y de la Yarra Valley, y el Parque Nacional de los montes Grampianos. La mayoría de las cosas para ver fuera de Melbourne están a una distancia de unos 45 minutos a 3 horas en automóvil, y las miniescapadas son una forma fantástica de conocer el estado de Victoria en su conjunto.
Costo de vida
No se puede negar que Melbourne es una ciudad cara y que el coste de la vida aumenta junto con el precio de las residencias. El coste de la vida en Melbourne ocupa el puesto 85 de las 578 ciudades del mundo. El coste mensual estimado para una persona sola es de 1.371 dólares, sin contar el alquiler. Los gastos incluyen el alquiler, la comida, la ropa, el entretenimiento y el transporte. No obstante, todavía hay muchas personas que se las arreglan para vivir de forma relativamente cómoda en Melbourne con sueldos medios. Y es importante tener en cuenta que, aunque Melbourne es una ciudad cara, ofrece salarios elevados según los estándares internacionales.
El salario mínimo nacional es actualmente de 20,33 dólares por hora o de 772,60 dólares por 38 horas semanales (antes de impuestos).
No hay que subestimar la práctica de la presupuestación, y un buen hábito a adoptar es comprar en los mercados locales y evitar comer siempre en restaurantes. Compara los precios del gas y la electricidad para encontrar los más rentables, y acuérdate de buscar descuentos y ofertas diarias, como tarifas especiales para estudiantes o niños, o entradas de cine más baratas entre semana.