La situación en las principales ciudades de Colombia se ha ido degradando en los últimos días y de manera notoria en su capital Bogotá. Manifestaciones, choques con la policía y episodios de extrema violencia y represión por parte de los aparatos del estado. La raíz del problema: una impopular reforma fiscal que perjudica las clases populares.
Este miércoles 5 de mayo la alcaldesa de Bogotá ha informado de una nueva jornada de violencia con un balance provisional de 46 personas heridas, de las que 30 son civiles y 16 son integrantes de las fuerzas del orden.
En la capital la movilidad se está viendo seriamente afectada por las protestas y los dispositivos policiales. Se han reportado además ataques a vehículos de transporte público y estaciones de autobús. Se han confirmado numerosos bloqueos en diferentes puntos de la ciudad.
Muchos de los actos de protesta ciudadana se están centrado en comisarías, hasta la fecha la Policía Nacional ha confirmado 25 ataques a sus dependencias, 3 de las cuales fueron completamente destruidas.
La espiral de violencia no ha dejado de crecer desde que se iniciaron las protestas ciudadanas por la propuesta de reforma tributaria que pretende llevar a cabo del Gobierno que dirige el actual presidente. Esta violencia se ha visto exacerbada debido a los numerosos casos de abusos policiales y al uso indiscriminado y no proporcional de las fuerzas de orden público.
Este clima de represión ciudadana y de falta de garantías para preservar los Derechos Humanos ha llevado a la alcaldesa de Bogotá a la creación de comisiones para reforzar las garantías de la protesta ciudadana. Un total de 13 hasta la fecha de hoy que estarán formadas por delegados de organizaciones de Derechos Humanos, funcionarios de la alcaldía expertos en diálogo, oficiales de Derechos Humanos de la Policía y directivos del distrito de Bogotá. Su misión, hacer un seguimiento de las posibles vulneraciones de los derechos fundamentales de los ciudadanos colombianos.
No solo la capital colombiana se está viendo afectada por las protestas, la ciudad de Cali también está sufriendo perturbaciones, tanto en el centro de la ciudad como en su aeropuerto internacional. Menos importantes son los disturbios en Medellín y Cartagena.
El presidente Iván Duque ha empezado a mostrar signos de empatía hacia el movimiento de protestas que se han plasmado en su anuncio de crear un espacio de diálogo entre los diferentes actores implicados en esta crisis. «Quiero anunciar que instalaremos un espacio para escuchar a la ciudadanía y construir soluciones», anunció.
Pero da la impresión de que la herida se ha ido agrandando, ya no solo por su inicial rechazo a negociar la reforma, sino sobre todo por la mano militar con la que ha pretendido gestionar la contestación popular. En la conciencia colectiva pesan mucho las vidas de los 19 manifestantes muertos hasta la fecha y se considera que desde el gobierno se deben realizar gestos de un mayor calado en pos de la reconciliación nacional. También se espera del ejecutivo una rectificación y unas excusas, que para los familiares de las víctimas llegan tarde.
Celebridades colombianas de proyección mundial han comentado con tristeza en las redes sociales su sentir por la caótica situación que vive el país. Shakira : “Es inaceptable que una madre pierda su único hijo a causa de la brutalidad. Y que a otras 18 personas se les arrebaten sus vidas en una protesta pacífica. Es inaceptable que una madre pierda su único hijo a causa de la brutalidad. Y que a otras 18 personas se les arrebaten sus vidas en una protesta pacífica. ” El cantante J Balvin comentaba que “cuando recobremos la moral, posiblemente recuperaremos la paz . Pero nuestros muertos nunca. No a la violencia.” Radamel Falcao: “Hago un llamado a la no violencia y pido se valore y se respete el derecho a la manifestación pacífica”