Cambiar de trabajo en el extranjero
Clara, barcelonesa de 27 años, vivía en Boston donde se estaba labrando una carrera como fotógrafa. Tras un máster y unos años trabajando en la ciudad, ya se había hecho un buen círculo de contactos y su carrera había empezado a despegar. Por motivos personales, un día tuvo que dejarlo todo e irse a vivir a Londres. Dejó de ser una expatriada en EEUU para pasar a serlo en el Reino Unido, donde tuvo que arrancar de cero.
Matilde, valenciana de 28 años, llegó a Bruselas para el periodo venció, tuvo que buscar un nuevo trabajo en la ciudad porque no estaba dispuesta a volver a España. A los pocos meses encontró una nueva posición en otra empresa de consultoría en la misma ciudad.
Ambas son ejemplos de emigrantes que han reconducido su vida profesional estando ya fuera de España. Buscar trabajo desde el extranjero a veces se puede hacer más cuesta arriba, ya que seguramente no tenemos tan interiorizadas las dinámicas de búsqueda, ni conocemos tan bien nuestro sector en ese país. Y eso que la búsqueda es algo frecuente, ya que los expatriados tienen mucha más movilidad que quienes están establecidos en su país de origen, quizá en busca de la reunificación familiar o de pareja, o simplemente para llegar a nuevos retos profesionales o conocer nuevos países.
El primer consejo para empezar la búsqueda es el siguiente: "Hay que tener claro qué tipo de posición estamos buscando y cuál es nuestra oferta de valor, nuestra 'marca' como potencial candidato", explica Marta García-Valenzuela, directora de diversidad y desarrollo de directivos de Talengo Internacional.
El tipo de profesión que desarrollemos hará que nuestra búsqueda de trabajo vaya en una dirección o en otra. Las agencias de colocación o los head hunters son un buen recurso para ello. En el caso de Matilde, su perfil de economía y empresas con un buen nivel de idiomas casó bastante con las agencias de trabajo que encontró en Bruselas, que suelen ser de perfil medio-alto. "Me dirigí a un par de ellas y en poco tiempo tuve algunas entrevistas de trabajo", comenta Matilde. Esta expatriada también destaca que buscó agencias que estuviesen especializadas en perfiles internacionales y no tanto locales. Es cuestión de hacer una buena búsqueda de agencias de colocación y expatriación que traten con perfiles lo más parecido posible al tuyo. "Las agencias de trabajo y los head hunters son un buen recurso en según qué perfiles, pero no suelen ser válidas para todos", matiza Ester Vilajoana, coach laboral. Y es que Matilde también asegura que en algunas agencias de head hunting le dijeron directamente que ellos no trabajaban con perfiles tan junior como el suyo.
"Al final, a pesar de alguna entrevista que hice, conseguí mi nuevo trabajo gracias a un amigo que hice en Bruselas", reconoce Matilde. Y es que el boca a boca o el networking sigue siendo la herramienta más útil para encontrar una nueva posición, tanto en España como en el extranjero. Debemos perder el miedo a comunicar a nuestros amigos, conocidos y contactos que queremos cambiar de trabajo. "Conocer gente, presentarte a personas de tu sector, mostrar interés por una determinada empresa y contactarles tú directamente acaba siendo la manera más eficiente para encontrar un nuevo empleo", señala Ramón López-Peláez, gestor del programa Jóvenes Belux, una iniciativa de la Cámara de Comercio de España en Bélgica y Luxemburgo. No importa el hecho de que estés en el extranjero; la red de contactos será clave para lograr el puesto que buscas. Acudir a afterworks, conferencias y todo tipo de eventos en la ciudad de acogida puede ser una buena vía para ampliar la red de contactos, estar al día de nuevas iniciativas y proyectos, y así acercarse cada vez más al nuevo empleo. "Es importante darse a conocer en tu sector para que te tengan en cuenta si sale una posición", añade López-Peláez.
En el caso de Clara, su ámbito profesional es completamente diferente al de Matilde. Ella ha trabajado siempre como freelance y el sector del arte no suele estar presente en las agencias de trabajo precisamente. Además, Clara tenía el doble reto de cambiar de trabajo y también de país, al pasar de EEUU a Reino Unido. "Al principio tuve muchos miedos, tenía la sensación de que tenía que empezar de nuevo a nivel profesional y eso ya lo había vivido cuando me mudé a EEUU", comenta la expatriada.
Los contactos es lo más importante para la carrera de fotógrafa de Clara y, afortunadamente, en un mundo tan internacional, muchos de sus contactos en EEUU todavía los mantiene en Londres. ¿Cómo lo hizo? "Para mí lo más importante era entrar en la comunidad de fotógrafos de Londres, porque mi campo puede ser muy solitario", explica Clara. "Era básico conocer a otros artistas que estuvieran produciendo y que creyeran en lo que estaban haciendo". Para ello, buscó un estudio en el que pudiese compartir su espacio de trabajo con más personas de su sector. Para conocer a más personas de su ámbito, Clara también se ha presentado directamente en algunas galerías y en revistas para ofrecerse como fotógrafa. "Lo importante es que vean que realmente crees en lo que puedes aportarles y que muestres verdadero interés por la empresa o la organización", señala.
Más allá de los típicos portales digitales de ofertas de empleo, el rey para encontrar nuevo trabajo sigue siendo LinkedIn. "Yo diría que es básico, vital, tener un buen perfil de LinkedIn y que esté bien posicionado", cuenta la coach Ester Vilajoana. "Es importante posicionarte como lo que busco, incluso más que como todo lo que tengo", explica. Para sacarle el mejor rendimiento a esta herramienta, la coach aconseja conocerla bien e intentar sacarle el máximo partido, ya que puede ser "sumamente útil" para la búsqueda de trabajo a nivel internacional. "Es importante usarlo como un recurso activo para buscar lo que quiero", apunta Vilajoana, y por lo tanto no pensar sólo en que alguien podrá llegar a tu perfil por su cuenta, sino usarlo para mantenerse al día de nuevos proyectos y vacantes.
Ser español y buscar un nuevo empleo fuera de España puede ser un punto fuerte a la hora de dirigirnos a una empresa extranjera, pero hay que saber cómo sacarle partido a nuestro perfil. "Los españoles tenemos más facilidad para establecer relaciones y esto se valora mucho en el extranjero", comenta Marta García-Valenzuela, de Talengo Internacional. Sin embargo, una de las principales barreras para los españoles sigue siendo una baja competencia en idiomas. Aun así, García-Valenzuela señala que "es importante luchar contra los estereotipos culturales que suelen tener sobre nosotros en algunos países en relación a nuestra capacidad de trabajo". Y recuerda que "muchos españoles han conseguido el trabajo que querían" en el extranjero. Buscamos a menudo una vacante a la que es mucho más difícil de llegar que estando en España, es costoso, para que nos vamos a engañar. Pero también es muy gratificante y puede ser que, al luchar tanto, filtrar tanto, pensar tanto qué queremos y qué podemos dar'¦ al final seamos capaces de conseguir un reto incluso más bonito.