Es muy común que en la última noche del año se pongan en práctica rituales que pretenden proyectarnos al año venidero cargados de nueva energía dejando atrás todo aquello que nos ha podido contrariar. En toda latinoamérica son muchas las pequeñas ceremonias que se realizan con este fin, algunas de ellas importadas, otras, muy ancladas en las culturas ancestrales. En la mayoría de los casos, ligadas al agua y al fuego.
Venezuela
En la noche de Fin de Año venezolana no puede faltar un plato de lentejas. La traducción de origen italiano, pretende atraer para los comensales, riquezas y abundancia. Otro de los rituales es llevar algo de dinero en el bolsillo durante la noche buena, para hacer bueno el dicho popular de “billete atrae a billete”. Otro preparativo que no puede faltar es una buena limpieza de la casa para purificarla de las malas energías. Algo más curiosa es la tradición para aquellos que están solteros y desean poner fin a esta situación, para ellos, el ritual quiere que suban y bajen de una silla hasta tres veces.
Perú
En el país andino son muy conocidos los llamados baños de florecimiento. Este ritual consiste en embadurnarse el cuerpo con flores, muchas veces esta cábala es llevada a cabo por un chamán, pero nada impide que pueda llevarse a cabo por uno mismo. Su finalidad es eliminar los malos sentimientos que se adhieren a nuestro cuerpo, como la envidia, los celos o la ira. Antes del baño de florecimiento se ha de proceder a la limpieza del cuerpo. También es costumbre rodear de flores objetos o fotografías que simbolizan nuestro deseos con el fin de que puedan llegarse a realizar. Otras dos tradiciones muy particulares a este país son el Ekeko, figura que simboliza la abundancia y la otra es vestirse de amarillo para despedir el año.
Ecuador
El país sudamericano nos propone un ritual para dejar atrás todo lo malo del año que termina. Consiste en fabricar un muñeco de trapo o cualquier otro material que representará todo aquello de lo que queremos desprendernos para empezar el año con el espíritu liviano. Antes de la media noche, le echaremos al fuego, para que con él ardan toda la negatividad acumulada. Este ritual también se realiza en zonas de Perú y Venezuela.
Méjico
En Méjico, como en muchos otros países de habla hispana, existe un ritual en torno a las uvas. A diferencia de España, donde la tradición quiere que se coma una uva por cada una de las primeras doce campanadas del año, en México, las uvas se comen antes de la medianoche y por cada una de ellas se pide un deseo. También existe un ritual para elegir la vestimenta, sobre todo en lo que se refiere a la ropa interior, habiendo un color según el tipo de deseo que se pida: rojo, para el amor o amarillo, para el dinero.
Colombia
En Colombia los fuegos de artificio de Fin de Año son tan populares como espectaculares. Comparte como muchos otros países de la región la tradición de comer doce uvas a la entrada de año, pero también tiene algunos rituales especiales. Uno de ellos, consiste en dar una vuelta a la casa con una maleta en la mano, si lo que se quiere es viajar en el año entrante,
Puerto Rico
La isla caribeña tiene al agua como principal elemento para sus rituales de purificación de Fin de Año. La tradición consiste en tirar ollas, sartenes o cubos de agua contra la fachada de la casa con el fin de atraer la buena suerte. También suele arrojarse agua por la ventana con el deseo de ahuyentar a los malos espíritus.
Cuba
En Cuba también se comparte rituales de la región caribeña, principalmente la quema de un muñeco que simboliza lo que queremos dejar atrás y la utilización del agua para purificar y atraer la buena fortuna. También es muy típico pasar un rato frente al televisor disfrutando en familia de la programación especial.
El Salvador
Ponerse la ropa al revés es uno de los rituales que se realiza en este país centroamericano. Según la tradición esto nos traerá suerte y bienes materiales.
Argentina
Amén de las consabidas 12 uvas, en Argentina se suele tener la costumbre de vestirse de blanco para atraer las buenas energías en el año venidero. Otra de las tradiciones locales es el encendido de velas al llegar la medianoche, con este ritual se pretende dar gracias por las buenas cosas que hemos recibido durante el año y atraer los buenos augurios para el año que entra. Las velas pueden ser de diferentes colores y tienen diferentes significados: rojo para el amor o amarillo para la abundancia.