A principios del presente siglo las cifras de residentes venezolanos en los países vecinos eran irrelevantes. En países como Perú, en 2015, los expatriados venezolanos no superaba los 3.000 residentes, pero en solo tres años pasó a 728.120. Un aumento de más del 30.000%. A día de hoy este fenómeno migratorio sin precedentes sigue alimentando un enconado debate entre los diferentes campos políticos y sociales de la región. ¿Hacia dónde nos encaminamos?
Cronología de un éxodo
Se han descrito 5 periodos dentro de esta ola migratoria. En 2003 y a raíz de la expulsión de varios miles de trabajadores del sector petrolero, muchos otros decidieron dejar el país principalmente con destino a Colombia, país que vivía una expansión de su industria de hidrocarburos.
Entre 2005 y 2008 se produjo una salida masiva de ciudadanos venezolanos, principalmente de clase media y alta, muchos de ellos empresarios, que veían limitados sus horizontes de expansión en el marco político impuesto por la revolución bolivariana. La nacionalización de empresas afectó a las élites económicas del país que se vieron obligadas a la expatriación. Sin embargo, en la primera década del siglo XXI la economía Venezolana estaba en expansión y las medidas puestas en marcha por el gobierno habían tenido un impacto positivo sobre todo entre las clases más desfavorecidas.
La siguiente década estuvo marcada por una verdadera crisis económica que provocó dos nuevas oleadas. 2015 registró un primer pico en las salidas, 697.562 venezolanos abandonaban el país. Ya no eran únicamente personas pertenecientes a las clases privilegiadas que buscaban preservar su estatus, sino de la clase media, que veía como sus expectativas de progreso económico se estaban frustrando.
La crisis económica no hizo más que acentuarse en los 5 últimos años de la década, generando más desempleo, inflación e inseguridad. En 2017 se calcula que fueron cerca de un millón y medio las personas que abandonaron el país y en 2018 la cifra superó holgadamente los dos millones, lo que representa un 7% de la población de aquel momento.
En la actualidad la situación está lejos de mejorar, el contexto en el que confluyen una crisis económica nacional y de la región, acrecentada por los efectos de la pandemia, no auguran un cambio en la tendencia. A día de hoy se calculan en más de 5 millones los desplazados de la llamada diáspora venezolana y se calcula que para 2024 puedan llegar a 10 millones.
¿Dónde han emigrado principalmente los venezolanos?
Según datos del año 2020 el primer país de acogida ha sido Colombia, donde residen 1.742.927 venezolanos. Le sigue Perú con algo más de un millón de residentes, Chile con 457.324 y Ecuador con 443.405. Los dos siguientes destinos de expatriación se sitúan fuera de la subregión: España, que recibió 395.747 venezolanos y Estados Unidos, 394.000.
Resulta particularmente llamativo el aumento porcentual en algunos países en los que esta ola migratoria ha comportado cambios en el tejido social. Colombia pasó de censar 48.714 venezolanos residentes en 2015 a 1.174.743 en 2018, lo que representa un aumento del 2.311%. Aún más espectacular es el caso de Perú que pasó de 2.351 residentes venezolanos en 2015 a 728.120, lo que significa un incremento del 30.870%. Igualmente significativos son los casos de Chile y Ecuador donde la comunidad venezolana no pasaba de 10.000 residentes en 2015, para en apenas 3 años, superar los 200.000.