Muchos estudiantes e investigadores internacionales temen no poder realizar sus sueños de estudiar en el extranjero, debido a las restricciones que impone la pandemia de COVID-19 para viajar y expedir documentos como visados.
Organizar un plan para estudiar en el extranjero antes de la pandemia ya era una tarea difícil, ahora dentro del confinamiento y sus restricciones, puede ser frustrante para muchos que desean tener una experiencia de estudio internacional. Los estudiantes de Brasil, por ejemplo, corren el riesgo de perder las becas en el extranjero. Europa cerró sus puertas a los brasileños en febrero de 2021 debido a su nueva variante, y sólo se permiten los viajes imprescindibles. Pero eso no sólo afectó a los turistas.
¿De dónde son los estudiantes?
Estudiantes de Brasil, Perú y la India comparten su frustración y el temor de enfrentarse a las restricciones de viaje.
Luiza Catapani, de São Paulo (Brasil), quiere estudiar un máster en Gestión Turística Sostenible de Recursos y Destinos en Barcelona (España). Vendió su coche, su piso y volvió a vivir en casa de sus padres para ahorrar dinero y cumplir su sueño de estudiar en el extranjero. "No tenemos ni idea de cuánto durará su decisión. Es una situación extremadamente frustrante y angustiosa, ya que tuvimos una larga preparación emocional, intelectual y financiera para las solicitudes, y tuvimos que renunciar a varias cosas en Brasil", dice Luiza, que podría perder su beca si la prohibición continúa.
Esta situación, en la actualidad, impide a más de 330 brasileños estudiar e investigar en España. Para dar voz a este caso, los estudiantes de Brasil, junto con Luiza, crearon un movimiento en varias páginas de redes sociales, que se llama Estudiar Es Esencial. Se pusieron en contacto con las autoridades españolas y brasileñas, solicitando ayuda para resolver el asunto, además de buscar espacios en los medios de comunicación y en las redes sociales para dar a conocer su causa.
Trabajar en el extranjero no está permitido
La educación a nivel internacional es una gran ventaja, ya que abre nuevas posibilidades de desarrollo profesional, así como de intercambio cultural y social. Sin embargo, para los que acaban de empezar a trabajar, una experiencia laboral en el extranjero también puede cambiarles la vida.
A José Vieira, también de Brasil, le gustaría trabajar en Alemania, un país que también ha prohibido a los estudiantes y trabajadores de Brasil debido a Covid-19. "Soy licenciado en ingeniería mecánica y tengo un contrato con una multinacional alimentaria, y al igual que los demás estudiantes, espero empezar en otoño", dice José. También participa en un grupo de estudiantes llamado Barred From Germany, con otros estudiantes, científicos, trabajadores, au pairs y voluntarios de Brasil que se encuentran en la misma situación.
India
Rhea Bhansali, de Mumbai (India), es una becaria Erasmus Mundus de doble titulación en hidroinformática y gestión de las ciencias del agua, concedida por la Comisión Europea. Su primer país de movilidad es España, el segundo el Reino Unido, el tercero Francia/Polonia/Alemania, y el cuarto es una tesis en cualquier lugar de la UE.
Actualmente es la única india con una beca de 49.000 euros totalmente financiada en este programa concreto y corre el riesgo de perderla en caso de que no se abran las fronteras. Actualmente, existe una prohibición de viajar a España para estudiantes, investigadores y profesionales en activo de la India.
Las embajadas de Mumbai y Delhi están aceptando solicitudes pero no sellan los visados hasta que se levante la prohibición de viajar. "Me siento asustada, ansiosa, preocupada por mi futuro, indefensa, perdida, sin ser vista ni escuchada. Para mí, estudiar en el extranjero significa innumerables oportunidades, un mejor nivel de vida, una perspectiva más amplia, una mayor red personal y profesional, intercambio cultural y una mentalidad de crecimiento", comenta Rhea.
Perú
Italo Del Castillo, es de Perú y espera estudiar una carrera de administración de empresas en Canadá en septiembre. Canadá nunca ha prohibido la entrada de estudiantes internacionales al país. Sin embargo, las medidas del país del norte a lo largo de 2020 fueron muy estrictas para los recién llegados, como solicitar una estancia en un hotel bajo su aprobación durante tres días para determinar si la persona da positivo en el COVID-19 o no. Después, había que someterse a un periodo de cuarentena de 14 días. Por otro lado, hoy en día las normas se están relajando y hay más posibilidades de que Italo vaya a Canadá, ya que los vacunados pueden entrar en el país.
Italo trata de mantenerse positivo, y para él, su sueño de estudiar en el extranjero podría esperar al próximo año si no hay otra manera. "Siempre hay un plan (b) para todo. Por lo tanto, mi objetivo sería posponer mi periodo de estudios al año que viene y volver a solicitar el permiso si las cosas no van como esperaba".
¿Qué hacer?
Para todos los estudiantes, su esperanza es que los países permitan la entrada con visados de larga duración, aunque requieran medidas de seguridad como pruebas de PCR antes del embarque y cuarentena tras la llegada al país de destino. Estos estudiantes buscan calidad de vida y realización profesional. Por ello, esperan que los gobiernos propongan una solución a sus casos, ya que llevan meses esperando y sin perspectivas. Por otro lado, con algunos casos de Covid-19 surgidos en Europa con la variante Delta, y teniendo en cuenta que todos ellos pretenden salir al extranjero en el próximo otoño, es cierto que el reloj no está a su favor.