Tomar la decisión de vivir en el extranjero puede ser un momento emocionante. Sin embargo, cuando llega el momento de anunciarlo a tus seres queridos, la tristeza o la culpa pueden invadirte. Entonces, ¿cómo decir adiós? Este artículo te brinda algunos consejos para manejar esta situación.
Una última reunión ...
Organizar una fiesta antes de ir al extranjero es una buena manera de ver a todos tus seres queridos por última vez y pasar un buen rato juntos. Puedes aprovechar la oportunidad para presentar el país en el que te instalarás o tu itinerario de viaje si vas a realizar una gira mundial.
Los niños estarán felices de recibir a sus amigos por última vez. Es un ritual que mantendrá sus mentes ocupadas y puede ayudarlos a aceptar mejor la partida. Es un buen momento para tomar algunas fotos que podrán ver más tarde para animarlos. Es una buena idea hacer que tus invitados dejen algunos recuerdos en un cuaderno que siempre puede ayudarles cuando experimentan la nostalgia del expatriado.
Presentación adecuada de tu proyecto de expatriación
Estar bien preparado para tu proyecto ayudará a defenderte frente a familiares negativos. Además, te ayudará a tener más confianza en tu proyecto y a hacer frente a las preocupaciones y la renuencia de tus familiares en caso de que haya alguna. Estar bien preparado también significa que no cederás al pánico inducido por tus parientes.
Si amigos y familiares descubren que estás bien informado sobre tu país anfitrión y que ya tienes contactos para encontrar un trabajo, o, mejor aún, que ya tienes un trabajo en el lugar, probablemente estarán menos preocupados. El sitio Expat.com proporciona una gran cantidad de información, así como los contactos que ya están en el sitio. También se pueden consultar fuentes oficiales como el sitio de la embajada del país.
Manejar la culpa y los remordimientos
"Me pregunto si debería culparme a mí mismo por no hacer lo suficiente por mis padres. No creo que sea el único en este caso. Y esta idea me trae un extraño consuelo. Un cóctel de culpa y duda, mezclado con una dosis poco saludable de autocompasión: lidio con eso una buena parte de mi vida diaria ", dice un expatriado indio con sede en Dubai en Gulf News.
Muchos expatriados enfrentan este sentimiento de culpa y duda. Algunos se preocupan por alejarse de sus padres mayores, otros sentirán que están privando a sus hijos de sus abuelos y viceversa, mientras que otros lamentan no poder visitar a sus padres o asistir a celebraciones familiares, así como a ciertos eventos como bodas o entierros.
Es importante no dejar que estos sentimientos te controlen todos los días, ya que pueden obstaculizar tu integración y evitar que aproveches al máximo todo lo que tu experiencia en el extranjero tiene para ofrecer. Si el peso de la culpa es demasiado pesado, puedes recurrir a un psicólogo especializado en expatriación.
Sin embargo, también es necesario dejar tiempo para hacer tu trabajo, tanto para uno mismo como para los familiares. Acostumbrarse a un nuevo país o la ausencia de un ser querido requiere un período de adaptación durante el cual es normal tener pasajes vacíos.
Use Internet para mantenerte en contacto
Los correos electrónicos, las aplicaciones de mensajería y las redes sociales han facilitado la comunicación en estos días y tendrás que encontrar una excusa mucho mejor para no mantenerte en contacto con tus seres queridos. Incluso si algunos países todavía tienen acceso limitado a Internet, uno debería poder encontrar la conexión al menos una vez por semana en cualquier lugar del planeta. Punto a tener en cuenta: la aplicación WiFi Finder ayuda a encontrar redes WiFi cercanas a ti en todo el mundo.
Aquellos a quienes les gusta escribir, tomar fotos o capturar videos pueden considerar comenzar un blog. Tus seres queridos tendrán ganas de viajar un poco con ellos y podrán consultar el blog cuando lo deseen en lugar de esperar noticias.