Leandro decidió de mudarse a China como misionero. Comenzó a trabajar como profesor de ingles y aprendió el idioma. Aquí nos explica como llegó a amar China más que a su nativo Argentina.
Cuéntanos un poco de ti, ¿quién eres, dónde vives, a qué te dedicas?
Me llamo Leandro. Soy de Buenos Aires, pero vivo en Beijing y trabajo como profesor de idiomas, específicamente Ingles y Español.
¿Cómo decidiste China como destino?
Aprendí chino para ser misionero en el idioma Chino en Argentina. Finalmente, decidí que quería expandir mi servicio misionero y me mudé a China. Ya tenía un amigo colombiano viviendo ahí, y si tienes un amigo en China es mucho más fácil mudarte.
¿Qué trámites has tenido que hacer para instalarte en China?
A través de algunos contactos me permitieron adquirir una visa en la embajada China en Buenos Aires, donde vivía en ese momento. Eso lo hizo mucho más fácil. Sin embargo, en general, es más fácil para los argentinos obtener una visa para China. Solo hay que ir a la embajada y pedirlo.
¿Fue fácil aprender el idioma?
Absolutamente no. El problema no es fonéticamente. Los chinos usan una gran cantidad de expresiones idiomáticas que están estrictamente relacionadas a su cultura, y a menos que uno conoce y entiende la cultura, uno tendrá dificultades para entender el idioma. A menos que entiendas los modismos, puedes tener dificultades para entender el contexto. Así que toma un tiempo entender eso.
¿Cómo es tu vida cotidiana?
Pasé la mayor parte del tiempo ocupado en el trabajo misionero o socializando con mis amigos. Es muy importante tener amigos locales para poder adaptarse a la cultura.
¿Cuáles son las actividades más populares allí?
Al menos en cuanto a deportes, parece que el bádminton es muy popular. Ir al cine también es muy popular. Y comiendo fuera. A los chinos les encanta ir a restaurantes y experimentar comida. En Beijing, ya que es una región montañosa, el senderismo también es muy popular.
¿Son acogedores los chinos?
En general los chinos son amigables, pero la cultura no siempre es tan cálida. Siempre fui muy bienvenido, e incluso me invitaron mucho en los restaurantes. La cultura china está muy centrada en ser buenos anfitriones, lo cual es muy agradable para los extranjeros.
¿Qué es lo que más te sorprendió cuando llegaste a China?
Mi impresión de China siempre fue Hong Kong. Pero Hong Kong no es China. Hong Kong es Hong Kong. Tan pronto como cruzas la frontera, las cosas cambian. Cuando llegué a Beijing, mi primera impresión fue que la mejor manera de expresarlo es el color gris. Los edificios son grises, el cielo estaba gris… claro, llegue en otoño, por lo que todo estaba declinando de todos modos. Sin embargo, cuando llegó la primavera, las cosas mejoraron mucho. La contaminación también fue un gran factor. Pero, una vez que comienza a llover, las cosas se pusieron mucho mejor y comencé de realmente disfrutar la ciudad. La primavera puede ser muy hermosa en Beijing.
¿Qué es lo que más echas de menos de tu país?
No mucho. Beijing se ha convertido en mi hogar. Cada vez que vuelvo a Buenos Aires, ya no me siento como en casa. Incluso las personas en Buenos Aires me tratan de manera diferente. Ya prefiero China.
¿Qué te parece el estilo de vida china?
Depende de dónde en China. Beijing es una parte muy rica y la vida allí es muy diferente. Pueden permitirse un montón de cosas y las personas son más ricas allí. Especialmente para un extranjero la vida puede tener un estilo más europeo. En los campos por otro lado, la vida es más pobre y puede toma un tiempo para uno acostumbrarse. Pero uno se puede acostumbrar y disfrutarlo.
¿Qué consejo le darías a aquellos que quieren vivir en China?
Es muy importante ser tolerante y de mente abierta. La cultura china no parece tener el concepto de espacio personal. A menos que entiendas eso, puede ser que te ofendes mucho. No tomas las cosas personales, especialmente en cuanto a lo que dicen o hacen los chinos. No son irrespetuoso, es simplemente su forma de ser. Y uno, como extranjero, necesita entender y respetar eso.
¿Qué no deben olvidar todas las personas que desean partir al extranjero?
Deben recordar que no tienen el derecho ni el lugar para tratar de cambiar la cultura u opinión de otras personas. El hecho de que su cultura sea diferente no significa que sea correcta -- es solo una cultura diferente. Y personalmente hay que entender eso. Especial en China te sentirás confundido si no respetas eso.
Lo mejor y lo peor?
Lo peor para mí fue la higiene. Realmente toma algo de tiempo para acostumbrarse a que los chinos no toman la higiene tan a pecho. Personalmente para mí también está la comida, que era buena, pero necesitaba un poco de tiempo para acostumbrarme porque no me gusta la comida picante.
La mejor parte fueron los amigos expatriados y chinos. Especialmente como misionero. Pero también el dinero que uno puede ganar como extranjero en China es muy bueno.
Si desea compartir su historia de expatriados, por favor contáctenos.
¡Gracias!
El equipo editorial de Expat.com