A primera vista, la situación en Oriente Medio, en particular en los Emiratos Árabes Unidos y Qatar, parece estable y lejos de ser crítica. Describirla como una crisis, como lo hace la prensa internacional, podría incluso parecer exagerado. Dubái sigue atrayendo a expatriados de todo el mundo. Sin embargo, un análisis más profundo de las tendencias a largo plazo indica un cambio sutil pero significativo. Profundicemos en ello.