Preséntate. ¿De dónde eres? ¿Cuánto hace que vives en tu nuevo país? ¿Cómo te ganas la vida?
Ante todo un saludo cordial a todos los que leen estas líneas para compartir una experiencia de vida. Soy Mauricio, vengo de Venezuela, mi país de elección, -me explico-, nací en Bolivia, pero siendo niño mis padres me llevan a Venezuela, es decir, fui un niño inmigrante. Toda mi vida la hice en Venezuela, mi niñez, juventud, adultez y, en definitiva lo más importante mi familia, es decir, mi esposa e hijos son venezolanos. Llegar a Bolivia represento tener que comenzar de nuevo, pues a pesar de que nací acá, todos los que me conocen me ven como un extranjero más que viene a buscar oportunidades de superación. De hecho en confianza me llaman “Venezuela”. Ironías de la vida…diría alguien por ahí. En fin, ya tengo siete meses viviendo en Santa Cruz de la Sierra – Bolivia. Decidí venir aprovechando los lazos familiares que tengo acá y que en cierta medida me han ayudado para establecerme en Bolivia. Hasta la fecha de hacer esta entrevista estoy haciendo pequeños trabajos de consultoría en docencia de educación superior. No he tenido todavía la oportunidad laboral de desplegar todos mis conocimientos y experiencia como desearía, pero bueno estamos en eso, intentándolo.
¿Por qué decidiste salir de Venezuela?
Salí de Venezuela porque lamentablemente no tenía oportunidades de desarrollo laboral, ni mejoras económicas, a pesar de ser un profesional, -con postgrado incluido-, mi sueldo no me alcanzaba para vivir. La inflación incontrolable de bienes y servicios hacen la vida allá muy cuesta arriba, aparte de la escasez cíclica de alimentos y artículos de higiene personal, entre otras cosas, sumado a la inseguridad desenfrenada no era estimulante quedarse en Venezuela. De ahí que decido emigrar para buscar otras oportunidades laborales y económicas, más que todo también para el bien de mi familia.
¿Piensas que eres la única persona única persona con estas motivaciones?
No, en lo absoluto, hay más de un millón y medio de venezolanos que han emigrado en los últimos 15 años, (según estudios de expertos e instituciones venezolanas) esto es, una situación preocupante ya que los que emigran en su gran mayoría son personas calificadas, con conocimiento y experiencia que muy bien pudieran aprovecharse en Venezuela pero que lamentablemente por la situación antes descrita prefieren salir de Venezuela.
¿Qué trámites y formalidades has tenido que hacer para instalarte?
Al salir de Venezuela hay que hacer una serie de trámites relacionados con la legalización de documentos académicos y civiles, que luego tienen que ser convalidados en el país receptor. Sin embargo, los trámites en Bolivia son también muy burocráticos. De hecho estoy en ese proceso, en especial los académicos.
¿Has tenido dificultades para adaptarte: la gastronomía, las costumbres, el clima...?
En general no, como nací acá, ya tenía una idea de la cultura de Bolivia en sus distintas expresiones, aparte de que me instale en una ciudad como Santa Cruz cuyo clima cálido es parecido al de Venezuela por tanto no me ha afectado mucho, salvo ciertos periodos de frio, que llaman “surazo”, que ni modo toca abrigarse mucho.
¿Cuáles son tus consejos para encontrar un trabajo?
Lo ideal es buscar trabajo de acuerdo al perfil profesional que uno tenga, para eso están las páginas de empleo de Bolivia que pueden ser una referencia y, mejor aún si se puede venir ya con un contrato en la mano. Sino venir y mentalizarse que a lo mejor al principio va a tocar hacer trabajos manuales que no tienen nada que ver con lo que uno hace, pero es parte del proceso de adaptación a unas nuevas condiciones laborales. De hecho a mí me ha tocado hacerlo, por decir un ejemplo, he sido taxista en su momento. Mientras se está en el proceso de legalizar los documentos académicos y/o civiles para trabajar conforme a la ley en el país receptor.
¿Es fácil hacer nuevos amigos? ¿Algún consejo?
Sí, siempre y cuando uno se adapte a la cultura del país receptor, es decir, sin prejuicios ni críticas a lo que se ve, se come y comparte. Es decir, con una actitud comprensiva de cómo funcionan las cosas en el país al que se está llegando. De esta manera es posible tener amigos que pueden identificarse con uno. De hecho esto me ha funcionado, ya tengo unos cuantos amigos bolivianos y, muy solidarios de paso. Aparte que también hay una pequeña colonia de venezolanos, incluso tengo una buena amistad, con un venezolano, -que se ha portado como un hermano-, que está viviendo acá en Santa Cruz.
¿Qué es lo que echas más de menos de tu país?
Echo de menos la familia, los amigos, los compañeros del trabajo que deje. Los paisajes naturales, obviamente las playas de Venezuela que son de una belleza extrema, su gastronomía. Pero también echo de menos el país que ya no es, en el que crecí, la Venezuela posible que solo saldrá adelante con la conjunción de todos los sectores para lograr un futuro mejor para todos.
¿Qué haces en tu tiempo libre?
Me gusta leer, lo hago mucho. Pasear por las calles y lugares de Santa Cruz descubriendo sitios interesantes de gastronomía, esparcimiento, relax, etc. Ir al cine ya que soy cinéfilo consumado. Aparte de reunirme cuando puedo con los amigos y/o familiares que tengo acá.
¿Cuáles son las actividades más populares allí?
Por lo menos en el Departamento o Estado donde vivo, los cruceños disfrutan mucho de los Carnavales, lo llaman “la fiesta grande” y de verdad se esmeran y son muy vistosos sus carnavales y lo disfrutan un mundo. Fuera de eso lo demás es comer, aquí disfrutan mucho de la comida. No hay restaurant o lugar de comida que está lleno de comensales. Así como los fines de semana están en los centros comerciales que están en auge en Santa Cruz, en donde, hay una variedad de reconocidas franquicias internacionales (bienes y servicios) que no hay nada que envidiar de otros países. También, disfrutan en parques o plazas donde se dan muchos actos culturales. Aparte de lugares naturales y/o históricos que también son atractivos para su disfrute por parte de los lugareños y extranjeros que vienen a Santa Cruz. Por último, como todos los habitantes de esta parte del continente suramericano, los cruceños y bolivianos en general, disfrutan y se apasionan con la práctica del futbol, hay muchísimas actividades deportivas, clubes y torneos ligados a esta disciplina.
¿Qué consejo le darías a aquellos que quieren instalarse allí?
Que si desean hacerlo que tengan la documentación legal (académicos y/o civiles) listo desde su país de procedencia. Eso sí, acá la burocracia es lenta para tramitar más que todos los documentos académicos se tarda de 6 meses a un año. Por otro lado hay facilidades para entrar a Bolivia, de hecho, por lo menos a los venezolanos, no le piden visa. Ahora que si vienen con un contrato de trabajo mucho mejor, se van ahorrar preocupaciones económicas. A menos que traigan capital para un negocio, que en Bolivia si hay condiciones para invertir, tanto económicas como normativas. En rubros como: Gastronómicos, de servicios, por decir, algunos. En este sentido, puedo decir que Santa Cruz de la Sierra es una ciudad pujante, ya que gravita a su alrededor actividades económicas relacionadas con el rubro petrolero y agroindustrial, sin desmerecer lo turístico que creo está en fase de expansión. Sumado a esto, en general, Bolivia tiene una inflación anual que no pasa de un digito porcentual, de hecho el año pasado fue de un: 5,19 %. Así como, hay una seguridad que te permite andar tranquilo hasta altas horas de la noche, de hecho me llamo la atención que hay fiestas familiares que comienzan a las 10 o 11 pm, eso dice lo tranquilos que están aquí. Claro, hago la salvedad, que si se dan ciertos delitos pero no de la magnitud y cantidad que se da en Venezuela.
¿Quieres volver a Venezuela?
Ahora en cuanto a volver a Venezuela, si es mi deseo a la larga, una vez que las condiciones críticas que mencione anteriormente se superen, volvería para ayudar a Venezuela con mi aporte, a hacerla un lugar deseable para vivir, como en su momento lo fue cuando mis padres me llevaron de niño a echar raíces y que hoy en día valoro como un venezolano más, sin negar el lugar donde nací y que espero que Bolivia pueda darme la oportunidad también de dar lo mejor de mí y, eso el tiempo lo dirá.