Una estancia prolongada en el extranjero con tratamiento médico continuado requiere una planificación cuidadosa. ¿Cómo conseguirá su medicación si está en el extranjero más de seis meses? ¿Y si hay escasez de medicamentos en el país de acogida? ¿Cómo adaptar su tratamiento a los medicamentos disponibles en el país extranjero?
Normas generales para expatriados
Las siguientes normas son generales y pueden variar de un país a otro. Teóricamente, una farmacia sólo puede dispensarte medicamentos para un mes, aunque le presentes una receta para 6 meses (salvo algunos medicamentos que vienen en cajas para tratamientos de 3 meses). No obstante, puede obtener una excepción poniéndose en contacto con su médico de cabecera y su compañía de seguros médicos.
Estancias de 1 a 3 meses
Para una estancia de 1 a 3 meses, necesitará una declaración jurada y una receta para recibir su medicación. La receta debe indicar "Viaje al extranjero" y el número previsto de meses de suministro. Opte por una receta con la Denominación Común Internacional (DCI): La DCI es el nombre científico del medicamento. Facilitará a los médicos extranjeros la búsqueda de sus productos.
Su médico deberá indicar en la receta la duración de su estancia. También autorizará a la farmacia a dispensarle todo el tratamiento de una sola vez. Usted es responsable de rellenar el certificado por su honor. En él debe constar la duración de su estancia y el nombre de la farmacia que le ha dispensado la medicación. Este certificado puede servirle si tiene dificultades para obtener o renovar su tratamiento en el país de acogida. Las estancias de 1 a 3 meses se consideran cortas, por lo que, en teoría, no necesitas obtener una dispensa de tu seguro médico. Sin embargo, depende de tu país. Es posible que tengas que obtener una autorización de tu seguro médico.
Estancias de 3 a 6 meses
Para estancias de 3 a 6 meses, primero debe presentar una solicitud a su compañía de seguros médicos, que le notificará su aprobación o denegación. Si su solicitud es aprobada, puede acudir a su farmacia con la receta (indicando la duración de su estancia). Póngase en contacto con su compañía de seguros con antelación para evitar sorpresas desagradables y asegurarse una respuesta a tiempo. En cualquier caso, el suministro excepcional de medicamentos no puede superar los 6 meses.
Estancias más largas en el extranjero
Técnicamente no es posible llevarse todo el tratamiento si tiene prevista una estancia prolongada en el extranjero. Para estancias superiores a 6 meses, tendrá que buscar un médico en el país de acogida. Informa a tu médico actual de tus planes. Es posible que conozca a colegas en el país de acogida. Su embajada también puede tener una lista de médicos. Pídale a su médico de cabecera una lista de medicamentos alternativos por si los que toma no están disponibles en el país de acogida (esto dependerá del país al que se traslade). Pida una carta en la que explique su historial médico y cualquier alergia a determinados medicamentos. No olvide hacer traducir la carta al idioma del país de acogida y discutir con su médico la lista de medicamentos y suministros de emergencia que necesitará.
Sin embargo, hay algunos medicamentos que no podrá llevar consigo, aunque vaya a permanecer en el extranjero durante un largo periodo. De hecho, algunos de ellos no pueden dispensarse durante más de un mes. Algunos ejemplos son los hipnóticos o narcóticos, ya que su periodo de prescripción está determinado por la legislación local; los antivirales de acción directa (hepatitis C); los medicamentos que requieren un control especial o pruebas especiales. Las autoridades aduaneras del país de acogida también pueden exigir una receta médica. Las inspecciones serán más estrictas si transporta medicamentos clasificados como psicotrópicos o estupefacientes en el país de acogida.
¿Qué opciones tiene en caso de desabastecimiento de medicamentos?
En países como Grecia, Francia, Alemania, España y Suiza, las farmacias se quedan regularmente sin medicamentos. De hecho, la escasez de medicamentos va en aumento en Europa. Otros países como Estados Unidos, Canadá y Australia también sufren escasez. Algunos medicamentos están crónicamente agotados, lo que obliga a los pacientes a interrumpir su tratamiento durante varios días, lo que supone un riesgo considerable para su salud. En Francia, por ejemplo, hay escasez crónica de medicamentos cardiovasculares. Lo mismo ocurre con los antiinfecciosos e incluso el paracetamol. En respuesta a la crisis, el presidente Macron ha prometido 200 millones de euros de inversión para producir unos 50 medicamentos en Francia. Pero mientras tanto, a los franceses y a los extranjeros no les queda más remedio que conformarse con lo que hay.
Si uno o varios de sus medicamentos están agotados, primero tiene que averiguar de dónde viene la escasez. ¿Se trata de una situación de falta de existencias en el fabricante del medicamento o en su farmacia? ¿Es temporal, crónica o permanente? Lo segundo parece más fácil de solucionar, ya que basta con ir a otra farmacia. Lo primero puede causar más problemas, sobre todo si el fabricante indica que el desabastecimiento es crónico o a largo plazo.
Encontrar un medicamento alternativo
La primera solución puede ser buscar un equivalente. En primer lugar, los farmacéuticos del país de acogida pueden sugerirte un medicamento equivalente. Pero necesitarán el permiso de tu médico para hacerlo, ya que tendrán que asegurarse de que el cambio de medicación es posible. Además, el cambio puede implicar una modificación de la dosis.
Pida que le entreguen la medicación en el país de acogida
Considera la posibilidad de que te envíen la medicación. Existen normas estrictas sobre el envío viable de productos farmacéuticos. El transporte debe hacerlo una empresa especializada en este campo. Se requiere receta médica. Algunos medicamentos pueden enviarse sin restricciones, mientras que otros tienen restricciones o pueden estar prohibidos. Las restricciones pueden depender del tipo de medicamento, la cantidad transportada, etc. También hay que tener en cuenta las condiciones de transporte (algunos medicamentos deben transportarse a una temperatura determinada).
Todas estas normativas hacen que la entrega de medicamentos sea un asunto delicado. Compruebe que la empresa a la que recurre realiza entregas en su país de acogida. También debe consultar a las autoridades aduaneras de su país de acogida para saber si es posible ese transporte. Si tiene familiares en su país de origen, averigüe si pueden ocuparse de estos trámites por usted.
La otra opción es volver a su país de origen para renovar sus existencias de medicamentos.
Adaptación del tratamiento médico en el país de acogida
Entonces, ¿cómo se adapta cuando los medicamentos que toma regularmente no están disponibles en el país en el que se encuentra?
En primer lugar, consulte a su médico antes de viajar. ¿Cuál es la situación en el país de acogida? ¿Hay escasez de medicamentos? ¿Es una situación constante? ¿Están sus medicamentos en riesgo debido a la escasez? ¿Es fácil conseguir medicamentos en el país? ¿Hay farmacias accesibles? Estas preguntas son aún más cruciales si los medicamentos son esenciales para su salud.
Algunos medicamentos son difíciles de sustituir. Factores como la composición química, la dosificación, alergias y eficacia son elementos a tener en cuenta. La situación es diferente si, por ejemplo, se está mudando internacionalmente o es un cónyuge siguiendo a su pareja. En estos casos, es posible que no haya elegido el país de acogida y deba adaptarse a esta nueva realidad. Por eso, es importante asegurarse de que su afección médica es manejable durante el viaje, que su tratamiento puede ser ajustado o que puede obtener su medicación en el extranjero.
Antes de viajar, consulte a su médico sobre alternativas en caso de que su medicación no esté disponible en el país de acogida. Considere traducir su receta al idioma del país de acogida y al inglés si es necesario. Una vez que se establezca en el extranjero, busque un médico en el que confíe y que pueda supervisar su progreso. Ellos también pueden ajustar su tratamiento según los productos disponibles en el país. Asegúrese de que las farmacias sean fácilmente accesibles.
En todos los casos, una planificación adecuada es esencial, especialmente en lo que respecta a la afiliación a la cobertura de salud extranjera y los reembolsos. Mudarse al extranjero es posible, incluso con un tratamiento médico a largo plazo.
Enlaces útiles:
REINO UNIDO: NHS - Tomar la medicina en el extranjero
EE.UU: Centers for Disease Control and Prevention - viajar al extranjero con medicamentos
Japón: Ministerio de Sanidad, Trabajo y Bienestar de Japón - llevar medicamentos para uso personal
Países Bajos: llevar medicamentos al extranjero
Francia: Viajar con medicamentos
Unión Europea: recetas en el extranjero - gastos y reembolsos
Listas de escasez de medicamentos
Estados Unidos: escasez de medicamentos
Agencia Europea de Medicamentos: información pública sobre la escasez de medicamentos